Fácil de configurar y utilizar, Plex es una plataforma que convierte el ordenador en un centro multimedia al que se accede desde diferentes dispositivos. Además, proporciona acceso a películas y series de televisión, muchas de ellas gratuitas.
Fotografías, música, películas y series de televisión son algunos de los contenidos que se almacenan en la biblioteca del ordenador. Para facilitar su gestión y organización existen servicios como Plex, una plataforma de medios que ofrece también contenidos audiovisuales gratuitos (con publicidad) y acceso a más de 600 canales de televisión; no obstante, quienes lo deseen también tienen a su disposición varios planes de pago entre los que elegir que mejoran las características de la versión básica.
Gracias a Plex el usuario accede, por otro lado, al contenido de su biblioteca independientemente del lugar en el que se encuentre y el dispositivo que elija, siempre que cuente con una conexión a Internet. Y es que es compatible con los sistemas operativos Android e iOS; las plataformas Google TV, Apple TV y Amazon Fire TV; y las consolas de juegos Xbox y PlayStation. Incluso existe la opción de compartir esta biblioteca multimedia con familiares y amigos.
Aunque para utilizar Plex no es necesario una cuenta de usuario, su página web sí recomienda crearnos una. Si lo hacemos, disfrutaremos de varios beneficios como, por ejemplo, continuar viendo un contenido en un dispositivo diferente al de la última vez que nos conectamos. Hecha esta aclaración, para sacarle todo el partido hay que descargarse el programa Plex Media Server, disponible en su página web y seguir las indicaciones mostradas en la pantalla para completar el asistente de instalación.
Una vez hecho, el siguiente paso es configurar nuestro ordenador eligiendo para ello un nombre descriptivo y activando la casilla ‘Permitir el acceso a mis archivos desde fuera de mi hogar’. A continuación, llegamos a la pestaña ‘Biblioteca’ que es el lugar donde se van a depositar y organizar todos los ficheros multimedia disponibles (desde música y fotografías hasta películas y programas de televisión, pasando por otros vídeos) en nuestro equipo. Una de las ventajas de Plex es que para cada uno de estos contenidos tenemos una biblioteca distinta. De esta manera nos aseguramos que los archivos que luego van a reproducirse están en su correspondiente biblioteca perfectamente organizados y no mezclados los unos con los otros. Elegida la biblioteca, se añaden las carpetas con el contenido que hay en ellas pulsando la opción ‘Agregar carpetas’ que aparece en la parte izquierda de la interfaz (en este caso, hay que indicarle a Plex la ubicación exacta de estas carpetas en el ordenador para volcarlas automáticamente). Siguiendo estas indicaciones, el proceso de configuración habrá finalizado.
Además de organizar y reproducir la biblioteca multimedia del ordenador, Plex dispone de otras opciones interesantes. En relación a las películas proporciona información de interés como su sinopsis, la carátula, los actores que las protagonizan… Además, si el usuario quiere personalizar los subtítulos puede hacerlo eligiendo su color, la posición y el tamaño. También elegir la calidad de reproducción de los vídeos y programar ciertas tareas como realizar copias de seguridad y eliminar archivos de la caché antiguos todas las semanas.
Como hemos indicado, Plex funciona también como una plataforma de medios con acceso a diferentes contenidos. Esto significa que el usuario tiene a su alcance un amplio abanico de películas y series de televisión (muchas de ellas sin ningún coste) que puede ver en ese mismo instante o posteriormente activando la opción ‘Añadir a lista de seguimiento’. Para acceder a sus servicios de televisión en directo hay que dirigirse a la pestaña ‘Live TV’.
