¿Crees que pasas mucho tiempo navegando por Internet o en redes sociales? ¿Cada vez que suena una notificación de WhatsApp interrumpes lo que estás haciendo para mirarla? Si estas situaciones te suenan, es posible que ‘estés enganchado’ a tu móvil, y eso tiene consecuencias en tu bienestar digital: un uso excesivo y descontrolado puede alterar nuestra salud mental y física, llegando a provocar ansiedad, baja autoestima, falta de concentración, descanso inadecuado, abandono de las relaciones interpersonales, sedentarismo… ¡Necesitas una desconexión digital!

rutinas para mejorar tu bienestar digital

Por eso, los expertos advierten de la importancia de encontrar un equilibrio saludable entre nuestros hábitos diarios y el uso de la tecnología y recomiendan aplicar algunas estrategias para mejorar nuestro bienestar digital.

Estrategias para mejorar nuestro bienestar digital: 

  1. Limitar el tiempo de uso: es importante establecer límites de tiempo para usar aplicaciones, redes sociales y dispositivos, incluyendo la revisión de correos electrónicos u otras actividades en línea.
  1. Crear hábitos de desconexión. Sustituir el uso del móvil por una actividad relajante, meditación o una lectura antes de dormir puede mejorar la calidad del sueño y reducir la fatiga digital. También es aconsejable dejar los dispositivos digitales fuera de la habitación para evitar el consumo de pantallas antes de acostarse o nada más despertarse. 
  1. Configuración de notificaciones. Es posible controlar las distracciones silenciando las notificaciones de determinados servicios de mensajería o redes sociales. Además, se pueden configurar las alertas para que sean menos intrusivas o sólo recibir las de aplicaciones y contactos importantes.
  1. Gestión de redes sociales. Revisar cada cierto tiempo el listado de amigos, seguidores o cuentas que seguimos en redes sociales puede ayudar a diferenciar las relaciones en línea que más nos aportan y, en algunos casos, a reducir el estrés asociado con la comparación constante.
  1. Limpieza de armario digital. En muchas ocasiones, los dispositivos acaban convirtiéndose en una especie de ‘cajón de sastre’ en el que acumulamos vídeos, fotos, apps y archivos que rara vez volvemos a consultar. Por eso, es aconsejable limpiar y organizar habitualmente ese contenido e, incluso, eliminar o almacenar algunos ficheros y documentos en dispositivos externos para reducir el desorden digital y el estrés asociado a él. 
  1. Buscar el equilibrio entre mundo digital y real. Resulta fundamental fomentar actividades alejadas de la pantalla y dedicar tiempo de calidad a los amigos y familiares. Practicar ejercicio, escuchar música, disfrutar de actividades al aire libre, ver una película o una serie… son algunas opciones que nos ayudarán a contrarrestar los efectos negativos del sedentarismo relacionado con la tecnología.