La música acompaña muchas acciones del día a día: mientras se trabaja, se va en el coche o mientras se hace deporte. En este último caso, y para disfrutar de ella al máximo, resulta esencial hacer uso de unos auriculares inalámbricos que sean resistentes al sudor, la lluvia o el polvo, pero que también cuenten con un diseño cómodo o con los que también se pueda participar en una llamada con la mayor claridad posible. Estos auriculares inalámbricos para hacer deporte reúnen todas estas características.
Bose Sport Earbuds
Resistentes al agua y al sudor, estos auriculares inalámbricos integran unas puntas de silicona que crean un sellado hermético con el canal auditivo, mejorando así la escucha de música y reduciendo el ruido ambiente. Su forma de paraguas con ala flexible extendida hacen, además, que no se muevan durante el ejercicio. Se controlan desde un panel táctil situado en el exterior de cada uno de los auriculares, ofrecen 5 horas de autonomía y pueden gestionarse a través de la aplicación gratuita Bose Music.
JBL Reflect Flow Pro
Disponen de tres micrófonos con los que se consigue claridad en las llamadas, incluso en un día con mucho viento, aunque también cuentan con la función cancelación de ruido. Son compatibles con los asistentes inteligentes Google Assistant o Amazon Alexa, por lo que es posible activar el manos libres, comprobar el nivel de batería o apagar los auriculares con comandos de voz. Con certificación IP68, se pueden utilizar en un día de lluvia o en la playa ya que son resistentes al agua, al sudor y al polvo.
Klipsch T5 II True Wireless Sport McLaren
Con un sistema de eliminación de humedad y resistentes al polvo, estos auriculares permiten realizar ejercicio físico sin miedo a que se estropeen. Para una mejor adaptación, vienen equipados con seis pares de almohadillas ovaladas que se ajustan de manera confortable al odio. Además, permiten escuchar música y atender llamadas con una gran claridad de sonido y sin problemas de autonomía gracias a su batería con duración de 8 horas.
Philips TAA7306BK
Mientras se entrena o se hace ejercicio, informa en todo momento sobre la frecuencia cardiaca, con lo que es más sencillo saber cuándo aumentar el ritmo o cuándo reducirlo. Además de disponer de certificación IP57, siendo resistentes al agua y al polvo, se pueden limpiar en el estuche de carga mediante un ciclo de limpieza ultravioleta que tarda solo unos segundos.
Sennheiser CX Sport
Cuentan con un cable ajustable que se puede colocar de tres formas diferentes: alrededor del cuello, bajo la nuca o por delante. Incluso se acompañan de un clip para asegurarlos a la ropa. De esta manera, no se caerán por muy intenso que sea el ejercicio. Disponen además de un control remoto de tres botones para gestionar la música y las llamadas, y ofrecen notificaciones de voz para alertar de cuestiones como el estado de la batería.
Sony Link Buds
Tienen una autonomía de 5,5 horas que aumenta a 17,5 horas con el estuche de carga. También poseen carga rápida: 90 minutos extra de reproducción con tan solo 10 minutos en su funda. Una de las funciones inteligentes con las que cuenta es que son capaces de optimizar el volumen en función del lugar en el que se encuentre la persona: más bajo en lugares tranquilos y más alto en entornos ruidosos. También son compatibles con los asistentes de voz Google Assistant y Alexa.