Equipado con una pantalla táctil HD de 11,6 pulgadas, los estudiantes lo pueden utilizar como portátil y tableta. Incorpora, además, un lápiz Wacom AES para tomar notas, subrayar, dibujar...
En los últimos años, los equipos convertibles se han hecho muy populares en ámbitos como el educativo al combinar lo mejor de los portátiles y las tabletas. La clave está en que los estudiantes pueden adaptarlos a sus necesidades y utilizarlos de diferentes maneras gracias a sus versátiles diseños: lo consiguen gracias a la incorporación de unas bisagras especiales de 360º cuyas estructuras garantizan precisamente estos distintos usos. Un ejemplo lo encontramos en la familia TravelMate Spin B3 de Acer, disponible en varias configuraciones. En nuestro caso, hemos analizado el dispositivo TMB311RN-32.
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Con un peso de 1,45 kg sobre la báscula, enseguida transmite una buena impresión cuando lo sostienes. Sus acabados son correctos y al tacto la sensación, cuando tocas la tapa que protege la pantalla, resulta agradable. Un detalle que llama la atención es que en la parte inferior de la derecha se retroilumina una luz LED que, según cambia de color, nos recuerda que la capacidad de la batería decrece. Hay que recargarla cuando el LED está en rojo, un proceso que conlleva algo más de tres horas.
Ha recibido, por otro lado, la certificación militar MIL-STD 810H y su teclado puede hacer frente a derrames moderados, ambas características indicativas de su durabilidad y resistencia en el día a día.
Como hemos comentado al inicio del análisis, este miembro de la serie Acer TravelMate Spin B3 posee la capacidad de adoptar distintas formas: el clásico portátil, tableta, tienda de campaña… Pero, ¿cómo es la experiencia de interactuar con su pantalla? Es táctil y los alumnos pueden interactuar no solo a través de pequeños toques sobre su superficie sino con la ayuda del lápiz Wacom AES que se encuentra escondido en el lateral derecho. Se identifica rápidamente, es cómodo de usar y sirve para escribir a mano, tomar notas, dibujar, resaltar las ideas más importantes… En ambos casos, la experiencia es positiva y responde según lo previsto, aunque en ocasiones se echa en falta que esta respuesta táctil sea un poco más rápida.
El panel, que tiene un tamaño de 11,6 pulgadas y una resolución de 1.366 x 768 píxeles, en términos de brillo, color y luminosidad está bien y cubre a la perfección las necesidades del público al que se dirige. Como extras, destaca porque es antimicrobios y cuenta con protección Corning Gorilla Glass, un material que refuerza su resistencia ante los golpes y los arañazos.
Viene con el sistema operativo Windows 10 Pro y su configuración encaja con lo que necesita un estudiante de Primaria y Secundaria: un equipo que sea sencillo de utilizar que les permita estudiar, preparar sus trabajos y conectarse a la nube si, por ejemplo, preparan un trabajo en equipo. También acceder al correo electrónico, visitar sus páginas favoritas, visualizar contenidos multimedia… Su configuración incluye, a este respecto, el procesador de cuatro núcleos Intel Celeron N5100, una memoria RAM de 4 GB y una unidad SSD de 128 GB de almacenamiento.
El sonido es estéreo (incorpora dos altavoces situados en la parte superior del teclado) y se escucha bien si vemos una película o un documental. Hablando del teclado, las teclas están ancladas mecánicamente; los dedos se habitúan en unos pocos minutos; y el reposamuñecas aún no siendo muy grande proporciona una buena ergonomía. El touchpad es un panel táctil de tamaño mediano que no tiene ningún botón complementario y permite controlar con absoluta comodidad el cursor.
Este Acer TravelMate Spin B3 TMB311RN-32 ha sido provisto, en otro orden de cosas, con conectividad Bluetooth 5.0 y Wi-Fi a/b/g/n/ac y ax. Esta última nomenclatura, conocida también como Wi-Fi 6, promete una mayor cobertura y alcance de la señal al conectarse a Internet.
Mientras, a nivel de conectividad los estudiantes tienen a su disposición una ranura para tarjetas microSD, conector para unos auriculares de 3,5 mm, una interfaz HDMI (viene bien para conectarlo a una pantalla más grandes) y tres puertos USB (dos de clase A y uno de tipo C). Si tienen que conectarse en línea a través de una videoconferencia, la cámara que hay situada en la parte superior de la pantalla les será de gran utilidad. Su calidad es buena y el brillo ajustable. Sobre ella se ha colocado una pestaña que tapa el objetivo si fuese necesario. La duración de la batería es de unas 10 horas, lo que la autonomía ofrece buenos resultados.
Os proponemos que entréis en este otro enlace donde ya os hablamos de esta categoría de producto y os sugerimos otros equipos convertibles que por sus características son idóneos para los estudiantes.
