Las presentaciones orales son un método de evaluación y de exposición de conocimientos muy utilizado en Bachillerato y en la universidad. Con ellas se desarrollan diferentes habilidades relacionadas con la expresión oral y se pierde el miedo a hablar en público. Para llevarlas a cabo existen diferentes modalidades y una de ellas es PechaKucha. Este método fue acuñado por Astrid Klein y Mark Dytham en Tokio en el año 2003 y su nombre deriva de un término japonés que puede traducirse como ‘cuchicheo’.
Los dos jóvenes arquitectos crearon esta técnica para utilizarla en un evento en el que diferentes emprendedores pudieran exponer sus ideas en público en un tiempo limitado e intercambiar opiniones con los demás. Y tal fue su éxito que dio pie a la creación del PechaKucha Night, un encuentro a nivel mundial para compartir visiones sobre diversos temas.
¿En qué consiste?
Las presentaciones PechaKucha se caracterizan por ser breves y concisas. Esto se debe a que están basadas en el formato 20x20: el estudiante solo puede usar 20 diapositivas, cada una de las cuales es mostrada durante 20 segundos. En total, cada presentación dura exactamente 6 minutos y 40 segundos.
Para que el tiempo se cumpla de manera correcta, aquellos que realicen la presentaciones con este método deberán configurar las diapositivas para que estas vayan cambiando de manera automática una vez que hayan transcurrido los 20 segundos. En estas pueden utilizarse apoyos visuales y se recomienda que sean imágenes de gran tamaño, de carácter conceptual, y con poco texto para que los conceptos puedan ser asimilados de una manera más clara por los demás compañeros.
¿Por qué utilizar PechaKucha?
Uno de los principales beneficios que trae consigo utilizar esta técnica es que los estudiantes sintetizan su discurso y pueden ‘ir al grano’ con los conceptos principales que quieren exponer. De esta manera, el alumnado comprenderá que lo importante de una exposición es que el tema que se está explicando se comprenda de manera clara y que no es necesario ni recomendado incluir mucha información en las diapositivas ni tampoco que tengan una duración muy larga.
También es importante que el alumnado prepare bien el texto que va a decir y que no ‘corra’ demasiado pues puede acabar hablando demasiado rápido y que los demás estudiantes no comprendan lo que han dicho.