¿Qué diferencia hay entre ‘los pingüinos no pueden volar’ y ‘el fútbol es el mejor deporte del mundo’? La primera afirmación es un hecho que se puede comprobar y la segunda, una opinión que depende de los gustos de cada uno. Con ejemplos así de sencillos y contextos fácilmente reconocibles para el alumnado de Primaria ha sido diseñado ‘El laberinto de la información’, un recurso pedagógico gamificado para trabajar la alfabetización mediática e informacional (AMI) y el pensamiento crítico entre los 8 y los 12 años.
Detrás de esta propuesta, articulada por EduCaixa, el programa educativo de Fundación la Caixa, se encuentran Verificat y Maldita.es, dos organizaciones españolas especializadas en combatir la desinformación y que han trabajado mano a mano con docentes de Primaria para diseñar un recurso pedagógico según el currículum AMI de Unesco. “A la educación mediática e informacional se le suele dar más importancia en Secundaria, pero hemos comprobado que en esta etapa el alumnado no sabe distinguir la desinformación”, afirma Lucía Gómez, coordinadora de Educación de Maldita.es. “La mayoría de los niños ven contenidos en el móvil y en otros dispositivos digitales años antes de llegar a ESO. Si hay un consumo digital en la infancia, debemos tener recursos educativos preparados para esa etapa”, continúa.
A través de un juego interactivo
Ése es el principio de este recurso provisto de cuatro módulos de contenido, que se presentan como un juego interactivo en Genially; el docente puede trabajar cada módulo por separado online y también offline, con la versión descargable en PDF. “Es una herramienta pedagógica flexible y adaptada a las características del alumnado”, afirma Rocío Moreno, responsable del proyecto en EduCaixa.
La participación de los docentes ha sido clave para diseñar el juego y para su versión offline; también para definir los conceptos trabajados, las situaciones que muestran los vídeos o los ejemplos mostrados. “Trabajando con los docentes vimos que a los 8 años ya hay una madurez que permite discernir algunos conceptos clave mediante ejemplos significativos y con la ayuda de la maestra”, señala Cristin Figueras, responsable de Educación de Verificat. “Mostramos situaciones reales y cotidianas relacionadas con el uso de la información. En muchas de ellas está presente el uso del móvil, pero no sólo. Los niños reciben información de sus propios compañeros y amigos, yendo por la calle o viendo la televisión, pero también buscan contenidos en el ordenador, en la tableta...”, puntualiza la especialista en desinformación.
De esta manera, con ‘El Laberinto de la información’, EduCaixa ahonda en su oferta educativa para potenciar el pensamiento crítico junto al programa BeCritical de formación docente. La seña de identidad de ambos programas es unir el conocimiento de referentes sociales en la materia con el rigor educativo del profesorado.