La educación financiera consiste en enseñar diversas competencias y conocimientos relacionados con la gestión de los recursos económicos y materiales. Los estudiantes también pueden aprender a hacer un uso óptimo de dichos recursos, teniendo en cuenta su vida futura y laboral. A través de juegos conocidos como Minecraft o Monopoly, es posible trabajar junto a los más pequeños (a partir de tres años) distintos campos dentro de esta rama de conocimiento.
Monopoly
El clásico juego de mesa en el que gestionar la compra y venta de los edificios de toda una ciudad tiene beneficios en el ámbito de la enseñanza financiera: administrar el dinero que se posee, tomar buenas decisiones, pensar en la rentabilidad de futuro o evitar la quiebra son algunos de los aspectos que se aprenden en el mismo y que pueden aplicarse en la vida real. Recomendado a partir de ocho años.
Animal Crossing
Todos los títulos de esta saga de Nintendo resultan útiles para adquirir conocimientos de gestión económica y de recursos. Se trata de un ‘simulador de vida’ en el que cada objeto tiene un valor y un beneficio (si se obtiene). Además, es conveniente administrar adecuadamente tanto el dinero del juego como dichos objetos para prosperar y avanzar. Orientado a estudiantes a partir de los tres años.
Stone Age Junior
Simula el sistema económico de la Edad de Piedra, ayudando a los niños a descubrir qué es el trueque, cómo funciona y qué diferencias tiene con las operaciones monetarias. Permite construir una aldea y que sus habitantes intercambien objetos y bienes entre ellos en función de sus intereses: alimentos, jarrones, herramientas para cazar… de manera que se produzca un intercambio equivalente para ambas partes. Recomendado a partir de tres años.
Minecraft
Este conocido juego de ordenador El juego de PC más exitoso de la historia también cuenta con la capacidad de enseñar educación financiera entre sus distintas casi infinitas funciones. El modo supervivencia de este videojuego tiene un componente importante de gestión y obtención de recursos: madera, piedra, carbón, metales preciosos, herramientas de varios niveles… y también es posible llevar a cabo operaciones monetarias con los aldeanos que residan en las villas que se encuentran por el mapa, pudiendo comprar sus productos a cambio de esmeraldas. Recomendado a partir de siete años.
Ratland
Cada jugador del tablero debe regentar una de las cuatro comunas de ratas que existen en el juego, con el objetivo de hacerla crecer y convertirla en la predominante. Para ello, deberán gestionar bien la comida y los recursos, tomar decisiones trascendentales e incluso atacar a los vecinos para quedarse con sus pertenencias. Sirve para entender la importancia de la gestión óptima de los materiales, ya que cualquier decisión errónea situará en una mala posición a los jugadores. Indicado para mayores de tres años.
La educación financiera consiste en enseñar competencias y conocimientos relacionados con la gestión de los recursos económicos y materiales. Los estudiantes también pueden aprender, para desenvolverse en su vida futura y laboral. A través del juego del Monopoly y otros mas.