Me gusta pensar que dar y recibir perdón es una de las formas más bonitas de demostrarle a otra persona que nos importa. Pues, pedir perdón no solo implica que aceptamos nuestros errores, sino también que empatizamos con los sentimientos del otro y queremos reparar el daño causado.
Y, por otro lado, aceptando el perdón reconocemos que la otra persona no es perfecta, que puede equivocarse, y que pese a todo la valoramos y queremos.
Se trata, así, de una acción que pone en juego muchos componentes propios de la inteligencia emocional. En los dos casos nos invitan a relacionarnos mejor con los demás, descubriendo y aceptando cómo son, con sus cualidades y sus debilidades. Es por esto que en la escuela, que es un lugar donde la convivencia tiene un papel clave, debería trabajarse más.
Así pues, os propongo un juego de rol playing que ayudará a los alumnos a naturalizar los errores y ver que cualquiera puede equivocarse. Así mismo, conseguirá que se pongan en el lugar del otro, y aprendan una fórmula para pedir y aceptar el perdón.
¡Empezamos!
Organiza en grupos de 4 a los estudiantes y repárteles un cartoncito con el personaje que les tocará representar. No dejes que lo miren todavía, haz que lo mantengan girado mientras que tú lees en voz alta el inicio de la trepidante historia que vivirán:
“Entre las brumas de Isla Esmeralda, los piratas buscan con ansia el tesoro que James Hock, el antiguo marine de la Guardia Real, enterró hace ya algunas décadas. Esta vez, dos clanes enemigos, La Tripulación de los 7 mares y los Piratas del mar Egeo, han recibido una información clave sobre su localización y compiten para alcanzarlo antes que sus rivales".
Leo, Maricel, Bartolomiu y Andrew forman parte de la Tripulación de los 7 mares y, desafiando a un temporal que azota las playas de la isla, deberán tomar tierra y encontrar el cofre lleno de monedas antes que lo hagan sus enemigos.”
Explícales lo que esto significa: Ahora son piratas y tendrán que actuar cómo tal. Su objetivo es llegar a conseguir ese suculento cofre de monedas, pero no será tan sencillo: ¡Sucederán algunos imprevistos que tendrán que reparar!
Ha llegado el momento de que descubran su personaje. Se encontrarán con uno de estos 4:
LeoLeo es un pirata entrenado y muy capaz. Lleva muchos años surcando los mares y, pese a que se encuentra ya un poco cansado, no se imagina lejos del mar. |
MarisaMarisa es la mujer pirata más valiente. Nadie conoce mejor que ella los secretos del mar, pero tiene un carácter difícil y se enfada rápido. |
BartolomiuLeo es el más joven de la tripulación y solo lleva 3 años como pirata. Es bastante inexperto y, a veces, se equivoca. Sin embargo, se esfuerza mucho por aprender. |
AndrewAndrew es una pirata muy simpática y vivaz. Es feliz en su tripulación y se lleva muy bien con todo el mundo. Es de las pocas personas que se atreve a mediar cuando Marisa se enfada con Bartolomiu. |
Para ambientar más la actividad y la escena, podemos pintar un parche en el ojo a nuestros alumnos o colocarles un gorrito de pirata. Así, una vez que estos ya saben de su personaje, debemos pasar a leer en voz alta la primera de las situaciones.
¡A interpretar!
“Los cuatro intrépidos piratas han bajado a la arena ya y caminan rápido por la playa tratando de llegar a la selva. La tormenta es tan fuerte que el gorro que llevaba Bartolomiu ha salido volando; lo que no sabía Marisa es que era suyo.”
Pídeles que representen cómo resolverían la situación y pregúntales si creen que es necesario pedir perdón en este caso. Explícales lo importante que es reparar el daño que uno hace y como pedir perdón es una de las manera más acertadas. Si creen que en este caso deben hacerlo, explícales estas fórmulas.
- Fórmula para pedir perdón:
Verbalizar en voz alta cómo se ha sentido el otro + el por qué + “y te pido perdón” o “lo siento”.
Por ejemplo:
“Marisa, sé que estás enfadada porque te he cogido el gorro sin permiso y se ha perdido. Te pido perdón.”
“Marisa, sé que te sientes triste por perder tu gorro. Lo siento.”
- Fórmula para recibir el perdón:
Reconocer la emoción del otro + el por qué + “y te perdono.”
“Bartolomiu, sé que te has sentido mal porque no esperabas que se perdiese el gorro, y te perdono.”
A continuación, lee las siguientes situaciones. Diles que, como la primera vez, representen qué sucedería y que pidan perdón (si lo creen conveniente) siguiendo las fórmulas que les has enseñado:
¡Algunas situaciones más!
- Han continuado andando por la selva, pero Marisa sigue tan enfadada con Bartolomiu que no ha podido evitarlo y le ha gritado “inútil”.
- Leo ha tropezado con un rama mientras andaban por la selva y ha caído encima de Bartolomiu y Andrew haciéndoles daño.
- Sin quererlo, Andrew acaba de darse cuenta de algo: ha revelado a los piratas enemigos una información secreta que no debía dar.
- ¡No puede ser! Están muy cerca de la cueva que los conducirá al cofre de la monedas. Sin embargo, Leo ha roto el mapa sin quererlo.
- Al alcanzar el cofre, para bromear, Andrew ha hecho la zancadilla a Bartolomiu y este ha caído tirando a Leo.
Este ejercicio es muy efectivo para activar la empatía de los alumnos. Consigue que se comprometan con sus personajes y que, a través de las fórmulas de perdón, puedan reconocer y valorar también las emociones del resto de compañeros.
Finalmente, los estudiantes comprueban que cualquiera puede equivocarse y que el perdón tiene un efecto reparador, tanto para quien lo da como para quien lo recibe.
Rocío López Valdepeñas es maestra especialista en innovación educativa y emprendimiento.
Es un contenido muy interesante para desarrollar