Los niños necesitan moverse varias horas al día. Jugando y experimentando con sus cuerpos en todas direcciones consiguen adquirir un sistema sensorial eficiente y un nivel de concentración adecuado para el aprendizaje.
Sin embargo, el entorno con que se encuentran no suele favorecer su desarrollo motriz. Por las mañanas, los recreos se han visto reducidos por motivos curriculares. Por las tardes, los niños apenas juegan en la calle a causa, en muchos casos, de la excesiva cantidad de deberes, el miedo de los padres y sus aplastantes rutinas.
Encontrar un tiempo y un espacio para el movimiento dentro de esta férrea estructura se torna una tarea ciclópea. Poner la creatividad al servicio de este objetivo es de vital importancia para la salud y el buen desarrollo de nuestros hijos.
A continuación os propongo una actividad para aprender a través del movimiento en el aula.
A partir de 3 años
¡METAMORFOSIS! Un juego que ejercita cuerpo, oído, sentido del ritmo y percepción espacial sin dejar de lado el aspecto cognitivo.
1. Elige un proceso de metamorfosis o transformación;
un eclipse, la congelación o evaporación del agua, la transformación de una oruga en mariposa, el nacimiento de una semilla, la metamorfosis del sapo, la floración de un árbol…
2. Busca diapositivas o imágenes congeladas del proceso.
3. Sienta a los niños en círculo para que las observen y luego imiten.
Puedes aprovechar para buscar un cuento que tenga de protagonista al proceso que hayas elegido y así aprovechar para enriquecerlo. Por ejemplo,en el caso de la oruga de elegir la metamorfosis de la oruga, podrías introducir el cuento de “La oruga muy hambrienta”, de Eric Carle.
4. Busca una música que sugiera transformación a través de un crescendo.
5. Empieza a moverte al ritmo de la música.
Por ejemplo, siguiendo con el ejemplo de la oruga, haz ondas con todo tu cuerpo para desplazarte por el suelo. Poco a poco ve sacando unos brazos en cruz. Ponte de pie y como mariposa recién nacida empieza a volar al ritmo de la melodía.
6. El nivel de dificultad y de detalle puede aumentarse con la edad del niño.
Otorgándole, por ejemplo, la responsabilidad de elegir él mismo la música para su metamorfosis [1], introducir el detalle de la creación del capullo en el caso de la oruga, buscar las diapositivas, clasificarlas [2] y proyectar un PowerPoint mientras baila [3], crearse un vestuario y una escenografía [4]... Hacer una exposición sobre todo lo que aprendió con el proceso [5], recoger las impresiones de sus compañeros [6] y compararlas con las suyas propias [1], plantear una hipótesis sobre “qué pasaría con la oruga si” [2]... etcétera. Es decir, a más edad, mayor responsabilidad.
[1] Inteligencia Intrapersonal
[2] Inteligencia Lógico- Matemática
[1] Inteligencia Musical
[2] Inteligencia Naturista
[3] Inteligencia kinestésica
[4] Inteligencia Espacial
[5] Inteligencia Lingúística
[6] Inteligencia Interpersonal
[7] Inteligencia Intrapersonal
[8] Inteligencia Lógico-Matemática
Os dejo con un poema de “Las Metamorfosis”, de Ovidio. ¡Disfrútadlo!
A Dafne ya los brazos le crecían
y en luengos ramos vueltos se mostraban;
en verdes hojas vi que se tornaban
los cabellos qu’el oro escurecían:
los blancos pies en tierra se hincaban
y en torcidas raíces se volvían
Haydée Mesa, licenciada en Arte Dramático y especialista en Técnicas Gestálticas, con experiencia como actriz profesional y pedagoga teatral, conjuga estas disciplinas para profundizar en el conocimiento emocional.
Fantástico artículo. Una idea genial y muy bien explicado. Lo probaré con mis alumnos. Gracias!!
super interesante ya que nos ayuda a nuestra labor como agente educativa
Gracias por tu aportación, Haydée. Me resultan muy interesantes estos artículos, especialmente para mi trabajo con los niños más pequeños.
Un trabajo extraordinario.T.felicito una vez más, por tu manera de exponer los temas.Eres estupenda
El juego como recurso importantisimo, me ha encantado cómo lo has tratado, muy real, para poder llevarlo a la practica
Hermoso, felicitaciones!
Lo utilizaré para mi próximo taller con niños y niñas de la 1. y 2. clase.