Aunque nacemos con un grado mínimo de empatía, ésta se desarrolla con la edad y tiene que ver con la proliferación de las neuronas espejo, responsables de la observación e imitación de los estados emocionales del otro en lo que supone un intento del cerebro por experimentar lo que el otro está experimentando. Con este juego para desarrollar la empatía las maravillosas consecuencias de la expansión de estas neuronas son facilitar:
- la comunicación
- la resolución de conflictos
- el trabajo en equipo
Juego para desarrollar la empatía
Por eso, a continuación te propongo un juego que tiene como objetivo acercarse al punto de vista y la emoción del compañero, potenciando la empatía, “el arte de comprender emociones” y mejorando el bienestar en el aula.
Juega con tus alumnos o hijos a “¡Camina un rato con mis zapatos!” (A partir de 6 años)
Pautas:
Elige un conflicto surgido en clase entre dos alumnos. Por ejemplo: “Juan está enfadado con Luis porque éste le rompió el lápiz amarillo que aquél le prestó para colorear su dibujo en clase de plástica”.
Elige un buen momento para proponer a Juan y Luis jugar a ¡Camina un rato con mis zapatos!. Es necesario que puedan estar receptivos emocionalmente.
Explícale el objetivo de la actividad, si aceptan participar en ella: obtener herramientas para resolver conflictos a través de un juego divertido.
Dramatización del conflicto:
- Busca un espacio adecuado en el aula
- Recrea la escenografía, si los protagonistas lo consideran necesario. O sírvete sólo del atrezzo, en este caso, lápices y papel. Pero recuerda que también podéis sugerirlos con la imaginación.
- Propón a Juan y a Luis escenificar lo sucedido.
Cada uno se va a centrar en:
1. reconocer la emoción predominante tras la disputa
2. incorporar la estructura:
“Cuando”……. (me has roto mi lapiz) ..“he sentido”…(enfado )….“porque he pensado “que lo has roto porque no te importo… De la misma manera, Juan, contestará: Cuando he roto tu lápiz he sentido miedo porque he pensado que te ibas a enfadar conmigo”
Cambio de roles. Tras una primera escenificación en la que Juan hace de Juan y Luis de Luis. Invierte los roles incorporando la estructura anteriormente citada. Así, Juan y Luis tendrán la oportunidad de observar sus respectivas reacciones emocionales en la experiencia del otro.
Compartir experiencia. Juan y Luis hablan de cómo se han sentido en la piel del otro y qué efecto ha tenido ello en su perspectiva. ¿Se sienten más cercanos ahora? ¿Aumentó el grado de comprensión?, ¿Cómo fue vivir la experiencia en el rol del otro?
Procura crear una atmósfera lúdica y e interesante alrededor del juego.
Haydée Mesa, licenciada en Arte Dramático y especialista en Técnicas Gestálticas, con experiencia como actriz profesional y pedagoga teatral, conjuga estas disciplinas para profundizar en el conocimiento emocional.
Me encanta este ejercicio, Haydée! Y se podría hacer todo el rato 🙂
Grandes aprendizajes!
Es un buen ejercicio, me gusta la idea que primero cada uno recree lo que pasó y sintió antes de cambiar de roles. Gracias
Todos tus trabajos son !!!!bueniiiiisimos, me han gustado muchisimo, sigue así que vas allegar muy lejos,guapa.Un bedote
Me ha encantado este juego, ya que en él, resumes las tres grandes bases:La comunicación, la resolución de conflictos y el trabajo en equipo.Enhorabuena, la mayoria de los docentes deberiamos ponerlo en practica en el aula.
Genial. Me ha encantado. Sirve para alumnado, nuestros hijos/as y.. para nosotros mismos!!! Sería genial poder hacer este ejercicio cada vez que no te has entendido con alguien o hay algún conflicto...