Agilidad mental, paciencia y creatividad es lo que se necesita para superar los retos que proponen las apps para hacer puzles. Los hay para todas las edades, de diferente formato y dificultad. En esta selección se pueden encontrar desde propuestas pensadas para los más pequeños de la casa hasta juegos para un público familiar, pasando por desafíos difíciles de superar incluso para los más mayores.
384 puzles para niños
Esta aplicación está pensada para que los más pequeños de la casa empiecen a adquirir vocabulario y ejerciten su memoria desde edades tempranas. Los puzles reproducen objetos cotidianos, como los que se encuentran dentro de las casa, animales, plantas, etc. Una vez completada la figura, la app reproduce su nombre para que el niño aprenda a identificarlo. Se puede elegir entre 30 idiomas diferentes. Además, con este juego también empezarán a desarrollar sus destrezas digitales al formar los casi 400 puzles que se proponen.
Flow Free
En este caso no se trata de un puzle donde haya que juntar piezas hasta completar una figura. Flow Free propone conectar los puntos que tengan el mismo color para formar una tubería, aunque no se puede hacer de cualquier manera. Una de las reglas es que las tuberías no se pueden cruzar entre sí. Incluye varios juegos con diferentes niveles de dificultad. También se puede elegir el modo ‘Juego libre’, para entrenar antes de empezar a superar niveles; y el modo ‘Por tiempo’, en el que un cronómetro marca el tiempo que se tiene para completar el puzle de tuberías.
Roll the Boll
Hace unos años se pusieron de moda unos puzles en los que todas las piezas estaban dentro de una caja de la que no se podían sacar. Quedaba un hueco libre para poder desplazar los bloques hasta completarlo. La idea de esta aplicación es la misma, pero trasladada al formato digital y con un aliciente más: una vez que se completa el puzle se crea un camino por el que se desliza una bola. Roll the Boll incluye diferentes variantes, incluido una en laque probar las leyes de la física y otro para ejercitar la mente.
Monument Valley
La propuesta de Monument Valley es guiar a una princesa a través de diferentes monumentos misteriosos e ir superando etapas, cada una de ellas más difícil. Para conseguirlo hay que manipular los elementos con los que están construidos las arquitecturas y, así, abrir puertas, construir puentes o descubrir senderos ocultos para pasar de un sitio a otro. En este juego nos pueden engañar las ilusiones ópticas, por lo que sirve para trabajar la capacidad espacial y las figuras tridimensionales. Aunque según la calificación es apto para niños a partir de tres años, los más pequeños necesitarán la ayuda de un adulto. El diseño y la música está especialmente cuidados.
Tetris
Hace 35 años que nació el Tetris. La primera versión no tenía gráficos y los bloques estaban formados por corchetes. Afortunadamente no tardó en evolucionar y desde entonces ha pasado por las pantallas de máquinas recreativas, ordenadores y desde hace algún tiempo también por la de los teléfonos móviles. Hay muchas versiones disponibles y, aunque con variables, en todas ellas hay que colocar bloques de diferente tamaño de manera que se formen filas y columnas sin que queden huecos. Cuando se consigue, esas piezas desaparecen. El objetivo es dejar la pantalla completamente limpia.