4 motivos para seguir utilizando diccionarios de papel en clase

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4 Motivos Para Seguir Utilizando Diccionarios De Papel En Clase 2
Diccionario-pixabay

El diccionario está extinguiéndose de las aulas. Hablamos de los diccionarios en papel, claro, ya que el concepto de diccionario continúa utilizándose en su versión tecnológica, por ejemplo a través de apps para teléfonos y tabletas, con otras plataformas web con similares funcionalidades o incluso con dispositivos específicos.
Pero aquí hablamos del diccionario más clásico, la versión en papel. ¿Y sabes qué? Que el diccionario debería seguir usándose en clase, ya que hay muchos motivos para mantenerlo en las estanterías de todos los colegios. No a todas horas ni en todos los cursos, pero sí con mesura y detenimiento. ¿Por qué? Hoy te damos 4 motivos para seguir utilizando diccionarios de papel en clase.

El orden alfabético importa

Alfabeto - Pixabay En los primeros cursos escolares se enseñan las letras y los números, y también el alfabeto. Y ojo, porque no es un recurso sin importancia: conocer bien el alfabeto es imprescindible.
Podemos hacerlo de memoria, pero los diccionarios de papel nos permiten practicar el alfabeto y su orden de una forma cómoda y práctica. Al contrario que las versiones digitales, buscar una determinada palabra implica conocer este orden e ir avanzando por cada una de sus letras, hasta dar con la definición.
Un ejercicio que además es tranquilo y pausado, alejado del tradicional ajetreo de las clases en particular, y del mundo que nos rodea más en general. Los diccionarios en papel y su orden importan, y mucho, en la vida real. Y el ejercicio que podemos hacer con ellos es excelente para el aprendizaje en clase.

Las palabras (casi) no cambian

Palabras En Manos @ Pixabay En un mundo que cambia cada poco tiempo, las palabras no cambian. De acuerdo, debemos añadir ahí un "casi", ya que cada cierto tiempo se renueva el diccionario para adoptar nuevos términos, o nuevos significados. Pero son renovaciones puntuales, que no suelen tener impacto en los términos que buscamos y que son, generalmente, bastante comunes.
Esto implica que los diccionarios de papel son un recurso muy duradero. De hecho, algunas aulas continúan teniendo tomos con varias décadas de antigüedad, y siguen siendo herramientas válidas. No necesitas corriente ni conexión a Internet, sólo un libro y todo el conocimiento contenido en él.

Tómate tu tiempo

Herramientas Para Ahorrar Tiempo Decíamos antes que vivimos en un mundo ajetreado, tanto dentro como fuera del aula. El diccionario puede ser un punto y a parte en la vida escolar, un momento para tomarse un tiempo y ojear las palabras y sus definiciones. Deja que tus alumnos disfruten de estos minutos de relax, que investiguen por su propia cuenta cuáles son las letras que más palabras contienen, o los términos más extraños.
Aprenderán a valorar algo que los adultos tenemos grabado a fuego, y que algunos de los más jóvenes empiezan a perder con la llegada del mundo digital: a disfrutar un buen libro, a pasar las hojas y a leer descubriendo algo tan característico como una parte del lenguaje, las palabras.

Puedes jugar con ellos

Diccionario Educación @ Pixabay Sí, jugar con un diccionario. Por ejemplo con una actividad en grupo en la que tengan que encontrar palabras: aquellas que más les hayan llamado la atención, o las más largas, o las que nunca hubiesen pensado que existirían.
Esta actividad es tan sencilla como efectiva: hará que aprendan el valor de las palabras y sus significados, que afiancen el orden alfabético y mejoren su ortografía. Tampoco podemos olvidar la parte social: que colaboren, que debaten y que investiguen en grupo. Un ejercicio mucho mejor que muchos de los que acompañan los libros de texto.

4 Comentarios
  • No estoy totalmente de acuerdo con el segundo punto. Los diccionarios deben cambiar, pues además de nuevas palabras que hace décadas no existían (tablet, nugget, rissoto, bluetooth, wifi...), las normas ortográficas pueden cambiar (como hicieron algunas de ellas recientemente con la publicación de la Gramática de la Real Academia Española), y, además, algunas realidades pueden modificarse (por ejemplo, el cambio de la peseta al euro). Es posible que en esos diccionarios de hace décadas los ejemplos relacionados con el dinero estén expresados en pesetas.
    En cualquier caso, me ha parecido un gran artículo en defensa del diccionario en el aula.
    Un saludo.

  • -Sirven de base para un monitor digital
    -puedes calzar una mesa(muy coja)
    -puedes atrancar una puerta
    -Con muchos de ellos puedes ambientar una fotonovela del año 1900
    -aprenderán que un diccionario digital es mejor,más ligero, más potente y más rápido
    -aprenderán que el saber si que OCUPABA lugar.

  • Los diccionarios, comoquiera que estén soportados, precisan actualizarse a la realidad lingüística. Por ello, da igual que utilices un formato digital, pues, si el corpus no está actualizado, es muy posible que no encuentres lo que buscas. Sea cual sea el soporte, el contenido debe revisarse y actualizarse cada 5-7 años. Quizá el papel se extinga o quede circunscrito al uso de ciertas personas (como el vinilo para los melómanos). Cronos lo dirá. Mientras, no creo que haya nada por lo que discutir: quien prefiera el papel, papel.

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