“Nadie elige estudiar lo que no conoce”. No me quito de la cabeza esta afirmación tan sencilla y directa de Clara Sanz, secretaria general de Formación Profesional, pronunciada en el marco del reciente Edtech Congress de Barcelona. Sanz señaló también durante la entrevista que mantuvo con Carlos Magro, presidente de la Asociación Educación Abierta, que “la orientación profesional sigue siendo la asignatura pendiente del sistema educativo español”. 

No hay duda de que orientar es fundamental para ayudar y asesorar a los jóvenes estudiantes sobre qué quieren formarse en el futuro y, por tanto, a qué desean dedicar su vida profesional. ¿Cuántos de ellos han apostado en el pasado y apostarán en el futuro por una carrera universitaria o un ciclo de Formación Profesional por pura inercia sin saber si es la opción que realmente desean? ¿Cuántos desconocen la existencia de esa especialidad en la que podrían ser felices profesionalmente y adecuada a sus intereses y capacitación? El tema no es para nada baladí. 

En este congreso también tuve el placer de moderar una mesa redonda sobre innovación con docentes de Formación Profesional y el tema volvió a salir a la palestra: “La orientación es el gran agujero negro de la educación”, llegó a decir uno de los ponentes. Y es que ellos lo saben mejor que nadie, acostumbrados a lidiar con alumnado que llega a sus centros sin saber con certeza a qué quiere dedicarse profesionalmente. Me alegró mucho escuchar decir a Clara Sanz y a estos docentes que la FP en nuestro país ha experimentado un cambio espectacular y lo seguirá haciendo en el futuro con la nueva ley de FP Dual. “La FP es en la actualidad una vía de éxito y tiene que ser capaz de formar a lo largo de toda la vida”, apuntó también la responsable del Ministerio de Educación, consciente de que se acabaron los tiempos en los que uno termina una carrera o un ciclo formativo y cierra para siempre su etapa de formación.

"Debemos contar con una destacada y empoderada figura del orientador, un profesional con los recursos, el tiempo, la formación y la dedicación necesarias"

Javier Palazón

En esta sociedad en constante evolución, en la que se repite una y otra vez el mantra de que los estudiantes de hoy están preparándose para trabajos que todavía no existen, debemos contar en todos los centros con una destacada y empoderada figura del orientador, un profesional que disponga de los recursos, el tiempo, la formación y la dedicación necesarias para ayudar a todo el alumnado que se presente en su despacho en busca de información y respuestas. Creo que no hay nada más desolador para cualquier persona, y un auténtico desastre para el sistema educativo, que alguien dedique años a formarse en unos estudios que después abandonará por falta de vocación cuando podría haber disfrutado de otra especialidad mucho más afín desde el principio, pero de la que ni siquiera conocía su existencia.

Este editorial se publicó en el Nº 46 de la Revista EDUCACIÓN 3.0, correspondiente a mayo de 2022. Puedes comprar el último número de la revista en nuestra tienda online. En ella hay reportajes y artículos sobre educar por competencias, supervisión de exámenes online, un especial para preparar el centro para el próximo curso ¡y mucho más!