Esto es lo que necesitas para convertirte en un docente que deja huella
Para dejar huella como docente es fundamental ser un buen profesor, coherente con el centro, saber escuchar y convertirse en un ‘solucionador de problemas’. Así lo cree el filólogo y diseñador gráfico Miquel Rossy. Nos lo cuenta en este artículo.

Ser docente hoy día (al menos en Andalucía) de secundaria es agotador. Llevo 24 años dando clase y cada curso nos lo ponen más difícil: altas ratios (el doble que en el resto de Europa), evaluación x criterios de 200 alumnos, niños hiper estimulados que no atienden, muy nerviosos, incapaces de concentrarse en leer, padres sobre protectores que protestan por todo o te denuncian, sobrecarga de burocracia, directivas hiperexigentes, leyes cambiantes, ser tutor es morir entre papeles: protocolos de acoso, de absentismo, de suicidio...Si un niño hace nona y le pasa algo en la calle, la culpa es del docente. Me encuentro docentes jóvenes deseando jubilarse. Así estamos.