En unas semanas empezarán los exámenes de la EBAU, uno de los momentos de mayor incertidumbre para los estudiantes de Bachillerato, que han estado preparando durante mucho tiempo y cuyos resultados jugarán un papel casi decisivo en sus posteriores estudios. Y, por si fuera poco, a la tensión de los exámenes se añade la de tener que escoger cuáles serán los estudios que elijan en primera opción. Algunos ya tendrán esa decisión tomada desde hace tiempo; otros barajarán entre algunas opciones y algunos estudiantes se encontrarán ante un ‘callejón sin salida’. Por ello, que el profesorado pueda ayudarles a elegir su camino es clave para que no vivan estos momentos con tanto estrés e incertidumbre. Os propongo algunos consejos para orientar a los estudiantes de Bachillerato sobre su futuro.
Equivocarse no es un problema
Hay que hacer ver a los estudiantes que existen muchos caminos para llegar a una misma meta. Por ello, es tan válido hacer una carrera universitaria como optar por un ciclo formativo de grado superior, que es una opción de futuro que cuenta con una oferta variadisima adaptada perfectamente al mercado laboral. Además, es importante mentalizarles de que no pasa nada si empiezan un grado universitario y cambian después a otro al no ser lo que esperaban.
Conocerse a uno mismo
Antes de elegir unos estudios hay que hacer un trabajo previo que no todo el mundo hace y que puede marcar un fracaso o un éxito: conocerse a uno mismo. Es necesario hacer consciente al alumnado de sus fortalezas y sus debilidades. Algunas preguntas que pueden ayudarles a comprender mejor estas cuestiones son: ¿te gusta trabajar de cara al público?, ¿eres capaz de estar una jornada laboral entera con un ordenador?, ¿cómo gestionas los fracasos?, ¿qué te motiva?, ¿dónde y cómo te gustaría estar en unos años?, ¿quieres trabajar en equipo?, ¿eres creativo?.
No deben guiarse por la premisa ‘lo que tenga más salidas’
Esta idea, junto con estudiar lo que otros quieren que estudien, son dos de los mayores errores a la hora de escoger un camino. Aunque el futuro laboral es importante, hay que hacer comprender a los estudiantes que aunque una opción tenga muchas ‘salidas’, quizás no sea la que más se adapta a sus gustos o intereses. De igual manera, estudiar una profesión por ser tradición familiar o por obligación paterna no es para nada recomendable. Para ayudarles a romper con estas premisas, los docentes pueden animarles con preguntas como: ¿te motiva tanto esta opción como para estar cuatro años estudiándola?, ¿te permite tener un trabajo que haga que te levantes con motivación todas las mañanas?
Hacer un listado con opciones
Otra idea que puede realizarse en clase es animar a los alumnos a que hagan un listado en el que en una parte indiquen los estudios que les gusten, y en otra aquellas profesiones a las que nunca se dedicarían. Plasmar todos estos pensamientos les ayudará a clarificar sus ideas.
Centrarse en la lista de estudios e investigar sobre ellos
En las páginas web de las universidades es posible encontrar multitud de información sobre los grados que ofertan y sus planes de estudios. También podrán ver dónde se hacen las prácticas, como es la metodología de sus clases, así como a las profesiones que se pueden dedicar. Si se decantan por la Formación Profesional, pueden acceder a la web TODOFP del Ministerio de Educación y consultar cada ciclo formativo, sus módulos (asignaturas) y sus salidas profesionales.
Escoger las opciones que más hayan gustado y buscar las notas de corte en cada universidad o para cada ciclo formativo
Una vez seguidos los pasos anteriores, es importante explicar al alumnado que deben tener en cuenta la nota de corte de los estudios a los que quieran acceder, ya que el requisito de entrada a ellos dependerá de la nota media que obtengan entre la media de Bachillerato y la EBAU. Cuando hagan el listado deben ordenar las opciones siempre por orden de preferencia, pues puede que al principio no accedan donde querían pero sí acceder a la lista de espera ante posibles renuncias.
A qué universidad asistir
Otro de los aspectos a valorar si se decide cursar un grado universitario es conocer las diferentes universidades que lo imparten. Aquí es importante hablar con los estudiantes sobre su situación personal y sus opciones de futuro: preguntarles si quieren irse a otra ciudad o provincia a estudiar, qué universidad es la que más se adapta a sus intereses… Mi consejo y el que doy siempre a mi alumnado es que realicen la preinscripción a un ciclo formativo de grado superior si están inseguros respecto a poder entrar al grado universitario que desean.