Según el Plan de Acción sobre Adicciones (2018-2020) del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, el 21% de los estudiantes entre 14 y 18 años de edad hacen un uso compulsivo de Internet. Tal es la importancia de este problema que la adicción a la tecnología ha sido incluida en este plan junto a otras drogas reconocidas como el tabaco o el alcohol. Pero, ¿cómo saber si tu hijo está ‘enganchado a Internet’? Qustodio, la plataforma de seguridad y bienestar para familias, analiza con la ayuda de la psicóloga María Guerrero los síntomas más reconocibles para comprobar si un estudiante utiliza Internet de manera abusiva.
1. Aislamiento de la familia
Según la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), un 9% de los estudiantes entre 6 y 9 años de edad tienen un ordenador en su habitación. Esto puede provocar que los menores pasen demasiado tiempo delante de la pantalla sin la supervisión de las familias.
2. Cambios en la rutina y en las aficiones
A través del dispositivo móvil es más fácil mantenerse conectado a Internet en cualquier momento y lugar. Un síntoma que puede hacer sospechar es cuando el menor ha decidido cambiar sus rutinas por pasar más tiempo conectado o ha dejado a un lado sus aficiones.
3. Alteración del sueño
Una continua exposición a las pantallas puede trastocar las horas de sueño. Así lo indica el estudio ‘Adolescents dormits’ en el que se plasma que más de la mitad de los jóvenes españoles de entre 12 y 18 años de edad duermen menos de las siete horas de sueño recomendadas. Una cuestión que afecta al día a día, ya que un 40% de dichos jóvenes tienen problemas de sueño durante el día.
4. Fracaso escolar
Un uso abusivo de la tecnología afecta al rendimiento académico. Así lo estipula un estudio de la Universitat Autònoma de Barcelona que señala que los estudiantes que abusan de Internet tienen un mayor riesgo de empeorar su nivel académico en comparación con el alumnado que hace un uso adecuado de la tecnología (un 18,6% frente a un 12,3%)
5. Cambios de humor y en las relaciones sociales
Al igual que en cualquier otra adicción, el abuso en el uso de la tecnología puede generar cambios de humor repentinos e irritabilidad. Además, al pasar tanto tiempo conectados, los menores pueden perder interés por las relaciones sociales en la vida real.
6. Estrés ante la falta de tecnología
Esta adicción también tiene su particular síndrome de abstinencia, ya que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) advierte de que el 69% de los adolescentes españoles de 15 años se sienten realmente mal si no se conectan a Internet. Un porcentaje bastante superior si lo comparamos con el 54% de media europea.
7. Ansiedad y depresión
En los últimos años los trastornos de ansiedad y depresión han aumentado un 70% entre los niños y adolescentes por el abuso de Internet, según advierte un estudio de la Royal Society for Public Health de Gran Bretaña. Son, sin duda, los síntomas más difíciles de detectar, pero a la vez, los más peligrosos.