La empresa de auditoría y consultoría Deloitte ha elaborado, por décimo año consecutivo, un informe en el que enumera las tendencias tecnológicas que transformarán los servicios de las empresas en un futuro muy próximo. Sin embargo, los futuros trabajadores de esas empresas todavía se encuentran en etapa educativa y, por lo tanto, conviene conocerlas y saber cómo adaptarlas al aula con el fin de adaptar el proceso de enseñanza-aprendizaje a las nuevas necesidades.
Algunas de estas novedades pueden usarse en educación y, de esta forma, avanzar en el proceso de enseñanza-aprendizaje y adelantarse al futuro de los estudiantes para que, una vez que se integren en el mundo laboral, conozcan lo que se van a encontrar.
Tecnologías inmersivas en el aula
El informe adelanta que en algunos años predominarán las empresas impulsadas por inteligencia artificial. ¿No es una buena excusa para incluir esta tecnología dentro del aula? Hace algún tiempo, Begoña Gros, profesora de la Facultad de Educación de la Universidad de Barcelona, exponía tres usos de esta tecnología en clase, como la creación plataformas online de autoaprendizaje. Además, destacaba la robótica educativa: creación de robots que actúan como docentes virtuales. También hablaba sobre los chatbots: agentes de software conversacionales que actúan como profesor, estudiante o tutor en entornos virtuales de formación.
Vinculada a la inteligencia artificial, el informe elaborado por Deloitte destaca el aumento de las interfaces inteligentes que mejoran a través de la realidad virtual y la realidad aumentada la relación entre nosotros, con las máquinas y con los datos. Estas dos tecnologías inmersivas ya están muy presentes dentro de las aulas. De hecho, tal y como comenta Juan Luis Moreno, director de Innovación de la escuela de Digital Business The Valley, “estas tecnologías tienen capacidad para alimentar la curiosidad, por lo que, con su uso, se estará fomentando la implicación y la creatividad, ayudando a la retención de conceptos”. Pero, ¿cómo incluirlas? Son muchos los profesores que ya se han lanzado a la piscina con diferentes experiencias educativas. Además, otro recurso son los libros que incluyen realidad aumentada: una buena forma de educar en el futuro mientras se fomenta la lectura.
Almacenamiento en la nube y ciberseguridad
Este tipo de tecnologías no podrían entenderse sin los operadores y los servidores que trabajan en la nube y que permiten automatizar las tareas de administración y almacenamiento de archivos. Existen diferentes herramientas las que se puede acceder desde cualquier dispositivo móvil y servicios de almacenamiento que permiten subir a internet diferente documentos y trabajar con ellos en la red.
La última novedad que destaca el informe tiene que ver con la ciberseguridad: elemento clave en cualquier empresa que se precie, y también en educación. Es de vital importancia educar en ciberseguridad y enseñar a los estudiantes diferentes pautas para hacer un uso responsable de internet. De hecho, ya se está implantando en algunos colegios de Estados Unidos una asignatura de ciberseguridad gracias a la cual los estudiantes descubren los peligros que rodean a la red, así como todo lo que deben saber en caso de amenaza.