Fiel a su apuesta por la tecnología sostenible, Casio pone a disposición de los centros educativos hasta 70 modelos de ecoproyectores adaptados a las necesidades de las aulas y espacios educativos de distinto tamaño.
Estos equipos, que se basan en el uso de una fuente de iluminación con tecnología híbrida LED-láser en lugar de las tradicionales lámparas de mercurio, han sido certificados con el sello de sostenibilidad TCO. Se trata de un reconocimiento que tiene en cuenta la responsabilidad social y corporativa de las empresas y, en este caso, destaca la eficiencia energética y el respeto por el medioambiente de los productos de Casio.
Además, la firma cumple con la norma ISO 14001 de gestión ambiental y ha sido una de las primeras en ser reconocida con el sello ISSOP, que identifica a las empresas que no incluyen la obsolescencia programada en la fabricación de sus productos o que pueden ser reparables por un coste menor al de comprar uno nuevo.
Consumo reducido
Los ecoproyectores no requieren de cambio de la lámpara y garantizan 15 años de funcionamiento con un promedio de 20.000 horas de uso. También reducen el consumo energético, debido sobre todo a la tecnología de iluminación híbrida, pero también a que sus sensores de luz integrados se adaptan a las condiciones de iluminación del entorno, y se encienden y apagan inmediatamente, sin tiempos de espera, ofreciendo la máxima luminosidad en sólo unos segundos. Además, los componentes se estructuran de una forma más eficaz contra el polvo y lo divide en tres bloques para proteger el bloque óptico, disminuyendo así las labores de mantenimiento.
La apuesta por esta tecnología es, por otro lado, un ejemplo de la preocupación de la firma por el medioambiente, cumpliendo con los criterios de la Convención de Minamata: 92 países, entre los que se encuentran Alemania, Austria y Suiza, se comprometieron a suprimir la fabricación, así como la importación y exportación de productos con contenido de mercurio.