¿Cómo afecta la luz natural al rendimiento de los alumnos? Estudios como el desarrollado por la UPMC (Université Pierre et Marie Curie) y el INSERM (Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica de Francia) confirman que este tipo de luz aumenta hasta un 15% el rendimiento escolar. Con motivo del Día Internacional de la Luz, una iniciativa cultural promovida por la UNESCO que se celebra el 16 de mayo, analizamos la importancia que esta fuente de energía tiene en los estudiantes.
Más iluminación y ventanas más grandes
El estudio ‘El impacto de la luz natural en el rendimiento escolar de las aulas europeas’, realizado por la UPMC (Université Pierre et Marie Curie) y el INSERM (Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica de Francia) desvela la importancia de construir aulas diáfanas en las que la iluminación natural sea la protagonista. En él se analizó cómo afectaba este tipo de luz a los resultados escolares de 2.837 niños de edades comprendidas entre los 9 y los 12 años, distribuidos en 54 escuelas de toda Europa.
Las conclusiones demuestran que la luz natural mejora el rendimiento de los alumnos, especialmente en materias como las matemáticas, donde sus calificaciones se incrementaron hasta en un 15%. Además, se destaca también la influencia del área de las ventanas: cuanto más grandes son, más positivos son los resultados de los estudiantes.
Mejora la concentración y disminuye el estrés
Otros estudios como el de la Universidad de Nebrija coinciden al hablar de los beneficios de la luz natural en los espacios educativos y hacen referencia a cómo afecta a la percepción del color y la agudeza visual o cómo mejora la concentración y disminuye el estrés.
Una clase sin luz natural altera el patrón hormonal básico de los niños y disminuye su capacidad para concentrarse y cooperar. La clave, según confirman estos estudios, es controlar la entrada de luz natural en las aulas y combinarla con luz artificial, concentrándola en determinadas zonas para aumentar la atención cuando resulte necesario.