Los Chromebooks luchan por hacerse un hueco en las aulas de todo el mundo. En algunos países lo han conseguido, y en otros —como España— comienzan a conocerse como una alternativa enfocadas para educación. A su favor cuentan con su sencillez de uso; suficiente para las tareas que los chavales suelen realizar en el entorno escolar.
Hemos hablado con Jaume Pausas, Marketing Manager de Acer España, compañía que tiene en el mercado múltiples Chromebooks que atacan varios segmentos del mercado. ¿Te animas a descubrirlos?
Google, a por el dominio de los PC en educación
Reportes publicados durante los últimos meses traen noticias muy positivas para los Chromebooks de Google: quitan cuota de mercado a Apple, son una alternativa económica a Windows, ya suponen la mitad de los equipos de educación en Estados Unidos... Y todo eso con un porcentaje del mercado que se quedó cerca del 3% del mercado global en 2015. Eso sí, hay que tener en cuenta que empezaron a comercializarse en 2011 de la mano de compañías como Acer. "En EEUU Chromebook ya acumula más de la mitad de las ventas para educación, en España hemos empezado más tarde pero llevamos similar camino", asegura Jaume Pausas.
Pero, ¿qué es un Chromebook? Son los llamados 'portátiles de Google', que utilizan el sistema Chrome OS, el sistema operativo de Google para portátiles, un sistema caracterizado por basarse en la nube y en el que el navegador (Chrome) es el factor fundamental.
No es necesario instalar programas como en los equipos Windows, sino que se ejecutan desde el propio navegador Chrome. Un ejemplo es la suite de ofimática es Google Drive, sencilla pero suficiente para la mayoría de los casos, y no existe un reproductor multimedia ya que Chrome cumple sus funciones. En definitiva, en un Chromebook podrás hacer lo que haces en un navegador Chrome, y unas cuantas cosas más.
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A su favor, la sencillez en su uso que evita complicarse con software, instalaciones, buscar programas, etc. Tampoco hay que utilizar antivirus ni actualizaciones manuales. Velocidad, seguridad, facilidad y escalabilidad son las cuatro grandes características que Pausas asegura que tiene esta creciente plataforma que, al sustentarse en la nube, permite almacenar copias de seguridad on line, permitiendo el acceso desde cualquier equipo, en cualquier momento y lugar. "La tecnología tiene que ser invisible, una ventana a Internet y a las herramientas que usamos", asegura Pausas.
Los cuatro factores mencionados son, además, fundamentales en el entorno educativo, donde se prioriza el contenido y su creación sobre el sistema u otras características técnicas. "Asociaciones como la de Ikastolas en el País Vasco usan Google Apps for Education a través de todos sus centros y tienen miles de Acer Chromebooks distribuidos por secundaria o el caso de la escuela Jesuitak de Donostia donde han dotado a sus estudiantes del Acer Chromebooks 11", confirma Jaume, desvelándo los primeros grandes núcleos escolares que utilizan la plataforma Chromebook de Acer en España. "Chromebook se está convirtiendo en la herramienta por defecto usada en primaria y secundaria. A medida que las instituciones van trabajando más en la nube veremos un incremento de uso de este tipo de soluciones en educación universitaria y vocacional como ya se está viendo en otro países como el Reino Unido", continúa.
Baratos, ¿y también demasiado sencillos?
Los Chromebooks son baratos o, al menos, más económicos que lo habitual en los PC o Mac. Por ejemplo, en el mercado existen otras variedades de pantalla y características que van entre las 11 y las 15 pulgadas, con precios que comienzan en unos 300 euros.
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Las limitaciones se encuentran en los usos que se le dan: están orientados a aplicaciones sencillas con pocos requerimientos, por lo que en muchas ocasiones no es posible instalar algunos juegos o softwares específicos, que ni siquiera están disponibles en la tienda de aplicaciones desde la que se adquieren las utilidades compatibles.
Además, al basarse en la nube, la mayoría de funcionalidades requerirán una conexión a Internet para funcionar correctamente... lo cual es, de nuevo, un inconveniente en muchos centros, donde la conectividad a Internet requiere una importante remodelación. El lado positivo es que el software está tendiendo a ejecutarse en el navegador sin necesidad de instalar nada, lo cual le da alas a los Chromebooks. ¿Quién querría un editor de imágenes tipo Gimp o Photoshop si Pixlr lo ofrece a través de un navegador?