Acertijos y juegos de lógica e ingenio son los ingredientes de estos escape books, unos libros con los que los niños tendrán que resolver una serie de pruebas mientras se divierten leyendo.
Resolver un enigma con una serie de pistas para poder salir de una habitación antes de que se acabe el tiempo estipulado. Ese es el principal objetivo de un escape room, un juego de lógica e ingenio que también se traslada al ámbito literario a través de los ‘escape books’, libros en los que el lector tiene que ayudar a los protagonistas de la historia a resolver un problema o caso.
Así, la clave de estos títulos es que el lector no puede continuar leyendo hasta que no resuelva la prueba que se le presenta en cada uno de los capítulos o partes del libro. Todos ellos ofrecen unas reglas del juego al comienzo de la historia acerca del enigma a resolver ya que no se leen en orden sino que, dependiendo de las pruebas a realizar, hay que saltar de un capítulo a otro. Los siguientes escape books para niños están dirigidos a partir de seis años y en ellos los estudiantes encontrarán diferentes aventuras que vivir…. y leer.
Índice de contenido:
Con este libro, los estudiantes a partir de nueve años viajarán en el tiempo mediante un pulsímetro, una máquina que inventó el padre de Sita, una de las protagonistas de este relato, y que sirve para viajar al pasado. El problema es que alguien quiere acabar con este hallazgo y aunque Sita ha encontrado la primera pista que le puede llevar hasta esta persona, ella sola no puede resolver el misterio. Para ello, cuenta con la ayuda de sus amigos… y del lector. A través de retos, acertijos, pruebas de lógica y juegos de ingenio, los lectores tendrán que ayudar a Sita a conocer la razón por la que están desapareciendo los inventos del pasado y de qué forma se pueden recuperar. A la venta el 24 de febrero.
Geronimo Stilton se ha quedado atrapado en el museo de Ratonia, rodeado de momias, sarcófagos y todo tipo de testigos del antiguo Egipto. ¡Y encima en la noche de Halloween! Los estudiantes a partir de siete años pueden ayudarle a salir de ahí con la ayuda de un plano y las pistas que encontrarán en sus páginas. Al comienzo del libro se indican los niveles del juego (dependiendo de la exploración que se haga del museo) y las secciones en las que está dividido cada uno de ellos (aventuras, acciones, inventario y agenda).
Recomendado para estudiantes a partir de 10 años, está protagonizado por Lía, una chica que forma parte de la Hermandad de la Llave, un grupo de personas especializadas en abrir las puertas de nuestras ‘casas mentales’, en las que los seres humanos guardamos nuestros secretos y recuerdos. En el primer volumen, Lía tuvo que llevar a cabo diferentes pruebas para unirse a la Hermandad. Esta vez tendrá que usar todas sus capacidades para abrir las puertas que tiene la ‘casa mental’ de su compañero Andrew y así poner a buen recaudo la valiosa información que allí atesora.
Esta historia está compuesta por cuatro libros (recomendados a partir de los once años y hasta los 15) y ayudan a repasar inglés de forma lúdica y motivadora. Para ello, los lectores ayudarán a Sherlock Holmes a vencer al profesor Moriarty en este idioma. En los títulos se encuentran los ingredientes básicos para aprender una lengua de forma efectiva: motivación, uso real y reflexión sobre la misma. La motivación viene proporcionada por una historia interesante que les engancha y por tener que superar una serie de retos. La lectura presenta un uso de la lengua en contextos reales y siempre adaptada al nivel de los estudiantes. Además, ejercitan la reflexión sobre la lengua cuando solucionan los enigmas y, sin apenas darse cuenta, desarrollan las competencias en dicho idioma y ponen a prueba los conocimientos adquiridos en la escuela o el instituto sin aburrirse.
Ambientado en la película ‘Playmobil’ en la que una joven llamada Marla se embarca en una aventura en el mundo mágico de Playmobil para encontrar a su hermano pequeño Charlie, este título recomendado a estudiantes a partir de seis años, muestra los distintos ‘escenarios’ de este lugar en los que los lectores tendrán que ir resolviendo acertijos y pruebas para encontrar la salida. Cuenta con unos planos para situar al ‘jugador’ y muestra diferentes objetos con los que avanzar en la historia. Los lectores no necesitan lápiz ni papel para llegar al final.
