Una adecuada formación, cumplir con los requisitos que demandan las empresas, reunir las habilidades blandas y las competencias más valoradas… Existen muchos factores que pueden dificultar la entrada en el mercado laboral tras finalizar los estudios superiores. Y pese a que las agencias de empleo contabilizan hasta 200.000 vacantes sin cubrir a día de hoy, España cuenta con una tasa de paro juvenil por debajo de los 25 años del 28,4%; una de las más altas de la Unión Europea, según Eurostat.
Para cambiar esta situación, instituciones como la Universidad Alfonso X el Sabio destacan la necesidad de concienciar sobre la importancia de impulsar el talento, potenciar una formación de calidad y contribuir a avanzar en la integración laboral. Por ello, y en colaboración con empresas como Randstad, Experis o Adecco, ha creado un decálogo cuyo objetivo es impulsar la empleabilidad y ayudar a las futuras generaciones a insertarse en el mercado laboral. Estas son las pautas o recomendaciones que pueden contribuir a una inserción laboral exitosa.
Decálogo para encontrar empleo
- El conocimiento personal y la pasión por la profesión: para los expertos, descubrir cuál es la pasión por una dedicación o profesión y tener una actitud positiva es fundamental para allanar el camino laboral. A ello hay que unir la actitud, el entusiasmo y ser una persona optimista, dinámica y proactiva.
- La importancia de la flexibilidad o resiliencia: las agencias de RR.HH. señalan que, en los tiempos actuales, es recomendable tener capacidad para adaptarse a las necesidades del mercado laboral y miras globales.
- El cuidado de la marca personal y una estrategia definida: los estudiantes deben ser agentes activos, tener presencia en redes profesionales como LinkedIn o Infojobs y trabajar su perfil con coherencia, así como establecer una estrategia para hacerse ver.
- Objetivos claros con foco e investigación en el sector: cuando el estudiante tenga claros sus intereses y preferencias, es primordial que conozca la industria en la que va a moverse (si hay o no empleo, la preparación que requiere…). Porque una de las tendencias del futuro, según las agencias de empleo, es la incorporación de perfiles cada vez más cualificados y entre los sectores más demandados hoy en día se encuentran las ingenierías, las energías renovables, medicina y las ciencias de la salud.
- La formación continua y de calidad (longlife learning): en la empleabilidad influyen factores como los estudios completados, la experiencia profesional, las competencias transversales o el desarrollo de habilidades y los idiomas. Y en un panorama profesional tan cambiante, debido a las nuevas tecnologías, es necesaria la formación y actualización constante de competencias y habilidades.
- Refuerzo de las competencias en la era digital: la llegada de la IA ha cambiado la forma de trabajar y está posibilitando nuevas oportunidades profesionales. De hecho, informes del World Economic Forum estiman que el 60% de las empresas adoptarán nuevas tecnologías en los próximos años y 4 de cada 10 priorizarán la IA y Big Data en sus planes de formación. En este contexto, las habilidades tecnológicas serán clave en el futuro profesional de los estudiantes, así como aplicarlas de manera ética y responsable para beneficiar a toda la sociedad.
- Impulso del desarrollo de las power skill: junto a los conocimientos intelectuales y propios de cada profesión, es primordial reforzar las competencias sociales, la organizativas, la toma de decisiones y la capacidad de resolución de conflictos para destacar en el ámbito profesional.
- La relevancia de la experiencia práctica previa: tener la posibilidad de contar con prácticas profesionales durante la carrera o previamente a la inserción profesional ofrece grandes beneficios para los estudiantes, ya que les ayuda a irse definiendo como profesionales, a focalizarse en los sectores donde quieren trabajar y refuerza la calidad de sus perfiles.
- Preparación para el proceso de selección: es importante realizar una introspección previa a la entrevista de trabajo, investigar sobre la empresa que va a realizar el proceso, prepararse ante las diferentes fases y conocer las fortalezas y logros propios para destacarlos.
- Promoción del networking de calidad: trabajar las relaciones interpersonales, sinergias y conexiones con empresas es fundamental, ya sea para la primera toma de contacto con el mundo profesional como para conseguir nuevas oportunidades laborales.