A punto de finalizar el curso escolar, surge una amplia oferta de actividades dirigidas no sólo al desarrollo de las capacidades y las habilidades de los más pequeños, sino también a la formación de los docentes. Muchos de ellos aprovechan el verano para prepararse ante los retos que presenta un nuevo curso.
La aparición de las nuevas tecnologías, la necesidad de dar respuestas a nuevos problemas y el fomento de un aprendizaje más activo a través de las nuevas metodologías son algunas de las causas de esta formación. “La metodología tiene que buscar que el alumnado sea el verdadero protagonista del aula, no como actor pasivo que sólo se dedica a retener las explicaciones dadas por el profesor, sino como sujeto activo que es capaz de imaginar, pensar, solucionar problemas y crear”, apunta Juan Carlos Palomino, presidente de la Asociación Espiral, Educación y Tecnología. Como otros años, esta asociación promueve la formación docente a través de la Escuela Virtual de Verano 2016, que se basa en la integración de la tecnología en la educación. Los interesados deben inscribirse antes del 20 de junio. Los cursos se realizarán del 1 al 15 de julio en tres idiomas: castellano, catalán e inglés. En concreto, la oferta abarca:
Cursos en castellano:
Aprendizaje basado en Problemas y en Proyectos
Aprendizaje cooperativo en educación primaria
Realidad Aumentada, un aprendizaje conectado a la vida