Combinando las pinzas de madera antiguas con otros materiales como pintura, botones o pajitas es posible crear manualidades como animales (libélulas, gusanos…), coches de carreras o colgadores para dibujos o pañuelos. Te contamos cómo hacerlo paso a paso.
Libélulas con pinzas
Son ideales para decorar las cortinas de casa y muy fáciles de hacer. Solo hay que elegir un color y pintar la parte plana de las pinzas, trazando líneas horizontales o puntos. En el extremo que se utiliza como enganche se pegan dos ojos móviles y con dos porciones de limpiapipas se crean las alas: basta con darles forma de infinito, juntarlas y pegarlas al cuerpo del insecto.
Colgadores
Para organizar pañuelos, colgar tarjetas o dibujos… Dependiendo de la cantidad de cosas que se desee colgar, se cogen más o menos pinzas, que se decoran al gusto. Luego, solo hay que pegarlas en una base lisa de madera o plástico (que, a su vez, se pueda colgar en la pared).
Gusanos
Para esta manualidad es necesario contar con pequeños pompones de colores, y es tan sencilla como adherirlos con pegamento en una de las caras de la pinza, formando el cuerpo de un gusano. Después, se añaden ojos móviles y ¡listo! Se pueden hacer tantas como los pequeños quieran.
Mensaje secreto
Para entregar un mensaje bonito a un amigo o como detalle para el día del padre o de la madre, entre otras muchas ideas. Hay que recortar un trozo pequeño de papel tomando como referencia la medida de la punta de la pinza cuando se abre (tiene que poder doblarse tres veces de modo que el mensaje se vea correctamente). El menor escribe lo que quiera en la parte central del trozo, después, lo pliega y lo coge con la pinza. Los dos extremos que quedan sueltos se pegan en la parte de arriba y en la de abajo del objeto. Cuando se abre la pinza ¡aparecerá el mensaje!
Coches con pinzas de la ropa
Además de pinzas de madera se necesitan pajitas, tijeras, botones, hilo de lana y celo. Antes de comenzar a montar el coche, los menores pueden decorar la pinza como deseen. Para las ruedas se cortan dos trozos de pajita de aproximadamente 3 cm y se introduce el hilo de lana por medio, situando los botones en los extremos y sujetándolos por los ojales. Luego, se pone una en la parte donde abre y cierra, la otra al lado de la parte metálica, del lado donde se hace presión. Con celo se da una vuelta alrededor de la pinza para asegurar que la rueda no se salga ¡y a correr!