El 58% de los padres españoles afirma que sus hijos son plenamente conscientes de los riesgos y peligros de la red. Aun así, el 45% se muestra cauteloso y revisa manualmente el historial de búsqueda de sus dispositivos electrónicos; en muchas ocasiones porque les ocultaron su actividad en Internet o no hicieron caso de sus consejos. Así lo desvela un estudio de Kaspersky, que analiza cómo gestionan las familias el el uso de los dispositivos conectados a la red que realizan los menores.
Para fomentar un uso responsable, es adecuado que los progenitores mantengan una conversación fluida y abierta con los jóvenes sobre el uso de la red y que les enseñen a hacerlo con responsabilidad y sensatez. Dicho esto, el 54% de los padres españoles con niños entre 7 y 12 años señala que confía en que sus hijos autorregulen el tiempo que pasan navegando. Además, el 37% afirma no sentir la necesidad de controlarlos, y el 70% confía en que lo hagan de forma segura sin supervisión.
Las pautas
Además de revisar el historial de búsqueda, hay otros pequeños trucos que ayudan a las familias a gestionar el uso de los dispositivos por parte de los menores y también previenen importantes peligros que conlleva la red.
El ‘castigo digital’ es uno de ellos: consiste en prohibir el uso de los dispositivos si se ha producido un mal comportamiento. El 61% de los padres españoles también fija límites de tiempo para el uso de dispositivos conectados a Internet por parte de sus hijos, según este estudio.
Otra opción son los controles parentales, que usa un 39% de los encuestados. A modo de aplicaciones o desde el antivirus del equipo, se pueden instalar en los dispositivos de los jóvenes para controlar su actividad, limitar su uso o ver los detalles de su navegación. Y no sólo en ordenadores o smartphones: un 30% de padres ya lo tienen incorporado en las consolas de videojuegos en casa. También existe la posibilidad de configurar los routers Wi-Fi del hogar para desactivar el acceso a Internet después de un tiempo determinado.
Otras recomendaciones
Para ayudar a los padres a proteger a sus hijos y al resto de la familia de las amenazas online, algunas recomendaciones del estudio son:
- Adoptar el bloqueo automático de dispositivos para controlar el tiempo que utiliza el ordenador, teléfono inteligente o tableta.
- Las redes sociales forman parte del espacio personal de los niños, por lo que el control de su comportamiento en la red podría percibirse como una invasión de la privacidad. Tratar de involucrarse para conocer mejor sus intereses y establecer una relación más estrecha es una buena alternativa.
- A los pequeños no les suele gustar hablar del contenido que publican en sus redes sociales con los padres. Lo mejor que se puede hacer es hablar de cómo lo usan, sin criticar ni presionar, y ofrecer consejos para que tengan cuidado al hacer nuevos amigos o contactos.