Convierte las botellas de plástico en manualidades originales
Estas ideas fomentan el reciclaje, desarrollan la imaginación de los más pequeños y son sencillas manualidades en las que puede participar toda la familia.

Estas ideas fomentan el reciclaje, desarrollan la imaginación de los más pequeños y son sencillas manualidades en las que puede participar toda la familia.
Materiales como las botellas de plástico pueden tener una segunda vida convirtiéndose en todo tipo de manualidades con las que desarrollar la imaginación de los más pequeños. Con ellas, además, se fomenta la importancia del reciclaje para cuidar el medioambiente y se estimulan la creatividad y la psicomotricidad fina, a la vez que se disfruta de un rato agradable en familia. Recoge todas las botellas que tengas por casa y ¡a crear!
Índice de contenido:
Se utiliza solo la parte inferior de la botella, en la que se pintará el personaje Pokémon elegido; en este caso, Bulbasaur. Luego, se pinta toda la base de verde, el color principal del personaje, y se deja secar. Una vez seca la pintura, se pueden agregar detalles adicionales, como los ojos y las hojas en la espalda.
Se cortan tres botellas por la base, dejando flecos en la parte inferior que formarán las cerdas de la escoba. Luego, se insertan dentro de otra botella que también se corta por la base, pero en este caso, se deja el cuello intacto. Por último, se introduce un palo en el cuello, que se puede fijar con cinta adhesiva.
Con ella, es posible reutilizar botellas de plástico de refrescos o agua, en las que guardarán cosas como lápices, gomas o botones. Para crear este estuche reciclado se cogen dos botellas y cortan por la parte de abajo (el pie); el sitio recortado será donde se colocará la cremallera posteriormente. Se puede aprovechar la cremallera de alguna prenda como un pantalón o falda que quede pequeña o ya no se use y con una pistola de silicona pegarla a la botella (debe quedar bien fijada en ambas piezas). Para terminar se pinta el estuche y adorna al gusto: se puede utilizar lana, pegatinas, tela…
Hay que llenar cada botella de plástico con arroz y lentejas, combinando ambos ingredientes para crear diferentes sonidos. Es importante, eso sí, asegurarse de dejar suficiente espacio para que los granos puedan moverse libremente al agitar la botella. Como complemento, se puede crear un diseño personalizado pintando las botellas con colores brillantes, pegando adhesivos, cintas o cualquier otro material decorativo .
Se comienza tomando una botella de plástico (en este caso una garrafa de agua), y recortando su parte superior hasta obtener una forma adecuada que sirva como base para la manualidad. Luego, con un cordón de yute de 4 mm, se va cubriendo cuidadosamente la botella, pegando el cordón con silicona caliente hasta cubrirla completamente. Es importante colocar el cordón de manera uniforme, asegurándose de que quede bien adherido para evitar que se despegue. Finalmente, se teje el cordón de acuerdo con las instrucciones del vídeo hasta formar la cesta.
Este vídeo muestra cómo crear cinco manualidades diferentes, rápidas, fáciles y ecológicas usando botellas de plástico: un portacepillos de dientes, un estuche para lápices, un recipiente para pasta y un dispensador de bolsas para mantenerlas siempre ordenadas. Para todas ellas solo se necesitan botellas de agua o refrescos y sus tapones, cinta adhesiva, tijeras o cúter y pegamento, además de una cremallera para el estuche.
Los pétalos de tamaños diferentes se recortan del plástico de una botella, y con un mechero se irán quemando para darles una forma curva y eliminar los posibles picos y bordes que puedan cortar. A continuación, se dobla y corta una tira de cartulina para después enrollarla en un palito de madera como pistilo. Por último, se irán pegando los pétalos de manera intercalada y ¡listo!
Tras cortar con un cúter la parte inferior y la boca de la botella, hay que limpiar la pieza central, que deberá tener como diámetro la misma medida que un CD. Por otro lado, se forra un disco que ya no sirva con un recorte de cartón, cartulina o papel decorado. Al juntarlos se creará una cúpula de plástico en la que se puede meter una rosa con musgo natural o cualquier otra flor, y adornar al gusto.
Dos palos como los que usan los médico para explorar la garganta unidos por un palo fino que los atraviesa por el centro serán las hélices de este helicóptero. Mientras que una pequeña botella de plástico (su altura deberá ser la misma que el palo que une las hélices) será la cabina. Solo hay que agujerear el centro de la base y del tapón y hacer una pequeña incisión en la zona de la etiqueta. Y pasar una cuerda o un hilo por el orificio central y anudarlo al palo de madera, que atravesará la botella desde el tapón. Así, tirando del hilo las hélices se moverán.
Este tutorial propone crear un bote de lápices con una botella de plástico de cualquier tamaño y color. La parte inferior sirve como bote, y con el plástico restante se pueden crear las orejas de (en este caso) el cerdo. Se puede utilizar el tapón para recrear el hocico, y pintar con rotulador los ojos o decorar con pegatinas.
Utilizando botellas de diferentes medidas se pueden fabricar bichos para jugar con ellos o colocarlos como objetos decorativos. El primer paso es cubrir toda la botella con papel y cola y dejarla secar. Mientras tanto, se diseñan las alas del insecto, con plástico y papel traslúcido de los colores deseados; los ojos con círculos de goma eva blancos y dos puntitos negros y patitas con limpipipas de colores. Hay que pegar todos ellos sobre las botellas y ¡listo!
Esta idea busca estimular los sentidos de los más pequeños y calmar su estrés a través de una sencilla manualidad. Se comienza dando forma a los pequeños peces que se introducirán en la botella y, para ello, hay que rellenar globos de colores con un poco de agua y cerrarlos con un nudo. Después, se pegan sobre ellos unos ojos móviles y se recorta con cuidado la parte del nudo para recrear la cola del animal. Para finalizar la actividad, se llena la botella hasta la mitad con agua con colorante azul, se meten los peces y se cierra con cuidado.
Se comienza trazando una línea circular en la parte central de dos botellas y se recortan con ayuda de un cúter. Se hace un pequeño agujero en el tapón de una de ellas y se pega sobre ella la parte superior de otra pero sin el tapón. Después, se traza en un cartón la silueta circular de la botella y con esta plantilla se cortan seis círculos de cartón, dos de ellos completos y los otros cuatro dejando su interior libre.
Se pegan de tres en tres unos encima de otros para formar una base, se forran con papel de periódico y se pintan del color deseado. Una vez listos, se pega sobre uno de ellos las dos botellas unidas, se introduce sal de colores y se cierra con otro de los círculos de cartón. De esta manera, al girar la botella los pequeños podrán comprobar cuánto tarda la sal en llegar de un lado a otro de esta.
Goma eva en color azul y blanco y una botella transparente de dos litros son los materiales necesarios para recrear este objeto volador. El primer paso es eliminar la etiqueta de la botella y el anillo que tiene después de la tapa. Con esta, se marcan ocho círculos en la goma azul y se recortan así como la hélice del avión. Para la cola y las alas, se recortan dos rectángulos por la mitad. Con la goma eva blanca, se forra toda la botella y se van pegando sobre ella las distintas partes del objeto: las ventanas, las alas, los alerones y la hélice.
Con una garrafa de agua puede crearse una hucha en forma de cerdito en la que los más pequeños podrán guardar sus ahorros. ¿Cómo? El primer paso es conseguir cuatro patitas recortando rollos de papel higiénico y pegarlas sobre la botella. En la parte superior de esta, se recorta una ranura rectangular por la que se introducirá el dinero y se pinta toda la botella con témpera de color rosa. Una vez seco, se añaden los detalles: dos círculos negros en el tapón para simular la nariz, ojos móviles, dos orejas con goma eva rosa y una cola retorcida con pelapipas.