El campo magnético invisible que crea un imán cuando atrae o repele otros materiales puede parecer magia a los ojos de los menores. Con estos experimentos conocerán sus propiedades a la vez que se divierten.
Descubrir la fuerza del magnetismo a través de experimentos con imanes es una manera ideal de introducir ciertos conceptos científicos en clase o en casa. Cuáles son los polos de un imán, por qué se atraen y se repelen estos objetos o cómo se crea un campo magnético son algunas de las preguntas que podrán responder utilizando sus propias manos y los siguientes juegos.
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Después de una breve explicación sobre qué es un imán y cómo funciona la fuerza de atracción y repulsión, los niños ya están preparados para realizar este experimento. Para empezar, es necesario pegar ocho pequeños imanes con el polo negativo hacia arriba dentro de ocho tapones de botella; luego, hay que añadir otros dos a la punta de dos lápices, uno por el polo negativo y otro por el positivo; para a continuación colocar los tapones en un recipiente de agua de modo que se crea una fuerza de repulsión entre ellos que da lugar a imágenes geométricas. Así, según la manera en la que se acerque el lápiz del mismo polo, los imanes se moverán de distintas formas. Con el lápiz contrario, los pequeños pueden jugar a mover los tapones o a ‘pescarlos’.
Recomendado para niños a partir de 8 años, este juego para experimentar propone 25 actividades para explorar la fuerza del magnetismo mediante canicas o anillos, entre otros elementos. Con la ayuda del libro educativo incluido, los menores podrán aprender y realizar numerosos experimentos a la vez que se interesan un poco más por la ciencia.
A través de este sencillo experimento casero, los estudiantes de Primaria conocerán qué es el magnetismo inducido con monedas. Para hacerlo, es necesario tener a mano algunas de 5 céntimos y un imán de neodimio pegado al extremo de un lápiz. Cada vez que se acerca el lápiz a una de las monedas, se comprueba cómo ésta se une al extremo imantado pero, además, si la primera moneda se pone en contacto con la segunda, adquirirá las propiedades magnéticas de la primera (lo que se conoce como magnetismo inducido). Si el pequeño sopla la segunda moneda, verá cómo da vueltas y gira como una bailarina que nunca se cae gracias a la fuerza del imán.
Este kit de herramientas contiene una barra, una herradura, una brújula y otros accesorios para idear experimentos en casa o realizar demostraciones en el aula. Este conjunto de elementos permite que los pequeños manipulen los imanes y comprueben, como ellos quieran y gracias a su imaginación, las fuerzas magnéticas.
Esta recopilación de experimentos con imanes incluye un juego con imán líquido, con agua y globos y trucos de presión atmosférica, entre muchos otros. Es adecuado si ya se ha ‘jugado’ con los imanes de una manera más sencilla y se quiere pasar a un nivel superior.
Para llevar a cabo este experimentos se necesita una botella de plástico transparente, cascabeles, agua y un imán (que puede estar pegado a una varita o lápiz). Solo hay que introducir los cascabeles dentro del recipiente y hacer que los niños jueguen a moverlos en su interior desplazando la varita imantada desde el exterior. Otra opción es llenar la botella de agua; el truco seguirá funcionando ya que los cascabeles flotan cuando hacen contacto con el imán.
