Los deportes de aventura, que suelen realizarse al aire libre y en entornos naturales, ofrecen la oportunidad de explorar la naturaleza mientras se ponen en práctica habilidades físicas y competencias como el trabajo en equipo. Aunque por definición tienen como particularidad que ponen al deportista en una situación de riesgo, adaptados al nivel de todos los miembros de la familia resultan una actividad totalmente segura que, además, tiene amplios beneficios a nivel físico y psicológico: descarga de adrenalina y endorfinas, aumento de la atención, mejora de la autoestima… Estos son los beneficios de algunos de los deportes de aventura más populares.
Rafting: trabajo en equipo
Consiste en navegar en balsas inflables a través de los rápidos de los ríos: las secciones en las que el agua cuenta con una mayor velocidad. Entre sus principales beneficios, fomenta el trabajo en equipo y la superación de desafíos mientras se disfruta de entornos naturales. Si es la primera vez que se va a realizar, es recomendable contar con la ayuda de un guía especializado.
Escalada: confianza en uno mismo
El ascenso a través de paredes ofrece muchos beneficios físicos y mentales: mejora la fuerza, la coordinación y el equilibrio además de fomentar la confianza en uno mismo y el espíritu de superación. Esta actividad debe realizarse bajo supervisión de un instructor que garantice la seguridad de toda la familia y se puede hacer al aire libre o en rocódromos cerrados.
Surf: equilibrio
Aprender a remar, ponerse de pie en la tabla o mantener el equilibrio frente a las olas son los pasos básicos que se aprenden cuando se practica surf por primera vez. Esta experiencia, que permite conectar con el medio acuático de una forma divertida, se practica especialmente en zonas costeras como Cantabria, Comunidad Valenciana o Andalucía.
Parques multiaventura: superar miedos
Son espacios especialmente diseñados para el disfrute de una variedad de actividades al aire libre de forma segura y ofrecen circuitos con diferentes niveles de dificultad que incluyen puentes colgantes, tirolinas, redes y otros juegos de equilibrio y destreza. Están supervisados por monitores profesionales y se pueden encontrar distribuidos por toda la geografía española.
Piragüismo y kayak: cumplir las normas
Con estas actividades acuáticas se aprende a mantener el equilibrio en la embarcación, a utilizar los remos y seguir las normas del agua. Además, permite explorar ríos, lagos y costas mientras se hace deporte. No obstante, existen algunas diferencias entre ambas: mientras que en el piragüismo se utilizan canoas más estables, en el kayak se usan embarcaciones más deportivas y estrechas y ofrece una experiencia más desafiante. En ambos deportes es importante llevar chalecos salvavidas y recibir una serie de instrucciones de seguridad antes de realizarlos.