Las flores anuncian la inminente llegada de la primavera con bonitos paisajes llenos de color. Prueba de ello son los tonos rosa y blanco que dejan los almendros y los cerezos, dos árboles de la familia de las rosáceas muy difíciles de distinguir entre sí. Algunas de sus pequeñas diferencias residen en la hoja, pues mientras que la del primero es más estrecha y alargada la del segundo resulta más puntiaguda. Lo que sí comparten ambas es el encanto de su floración que puede verse en muchos parques de nuestro país como la Quinta de los Molinos de Madrid o la Ciutadella de Barcelona, con más de 6.000 ejemplares cada uno. Otras alternativas para contemplar y pasear a través de esta belleza natural son estos lugares que indicamos a continuación"
Valle del Jerte (Cáceres)
La mejor forma de observar su estampa floral es dirigirse hacia los miradores. Uno de los más famosos es El torno, aunque también hay otros como el de San Bernabé o el de Piornal. Cabe destacar también la ‘Fiesta del Cerezo en Flor’ de interés turístico nacional con actividades como el vuelo en parapente, barranquismo o las rutas ciclistas durante el mes de marzo. Los más pequeños encuentran también otras formas de diversión en la zona como el Parque Aventura para subirse a las tirolinas y otras atracciones.
Valle del Tiétar (Ávila)
En la cara sur de la Sierra de Gredos conectan varias sendas que unen las localidades de El Arenal, Guisando y El Hornillo. Una de ellas es la ‘Ruta entre ríos’ que tiene unos 10 kilómetros y es circular. A su paso es posible disfrutar del esplendor de sus cerezos en flor así como de la fauna local, con la posibilidad de observar águilas reales y grullas. Fuera de temporada cuenta asimismo con un bonito paisaje.
Villalpardo (Cuenca)
Este pueblo está ligado a la agricultura de diversos frutos, entre ellos las almendras. La mejor forma de contemplar las flores de sus árboles es realizar una ruta de senderismo y para ello lo más recomendable es dirigirse hacia Vadocañas. Hay varios caminos de entre 13 y 17 kilómetros de dificultad baja o moderada que están divididos en tramos para avanzar según se desee.
Loarre (Huesca)
Desde el municipio de Ayerbe y en dirección a Loarre hay un recorrido lleno de almendros a ambos lados de la carretera. Al llegar a su castillo románico se contempla también una floración extensa acompañada de murallas y torres muy bien conservadas. En un lugar cercano, en la Ermita de la Virgen de la Peña en Aniés, existen unas bonitas vistas de las flores.
Valle del Pop (Alicante)
En la comarca de la Marina Alta se celebra desde hace años el Feslalí, el festival de los almendros en flor de la zona con actividades infantiles y concursos de dulces de almendras, entre otros. La propia localidad de Alcalalí, que es donde se celebra este evento, cuenta asimismo con algunos caminos con encanto para disfrutar de las flores de estos árboles. Un ejemplo es este sencillo recorrido de unos tres kilómetros que permite conocer el Río Gorgos y una torre medieval.