El curso pasado, el CEIP Ventura Rodríguez (Ciempozuelos, Madrid) se sumergió en esta experiencia para mostrar y representar el significado de la palabra libertad. El equipo de docentes de 1º y 2º de Primaria que participó nos cuenta cómo surgió este proyecto interdisciplinar y cómo trabajaron con los estudiantes.
El trabajo por proyectos está intrínsecamente ligado al trabajo cooperativo, la la interdisciplinariedad y la globalización. Los alumnos de Primaria no entienden su realidad parcelada en distintas áreas o asignaturas, sino de manera global, realizando conexiones de manera natural entre los elementos que la forman.
Este proyecto nos permitió abordar un concepto muy abstracto desde elementos significativos y cercanos al alumnado. Se hizo también partícipes a las familias motivando a los niños a reflexionar, investigar y sacar sus propias conclusiones, ayudándoles a entender que la libertad, como su propio nombre indica, no está referida a una sola idea, sino que es una percepción que cada uno de ellos debía elaborar para entenderla y asumiendo que su idea de libertad podía ser diferente a la de los demás, pero igual de válida.
El concepto de libertad
¿Hacemos un musical para final de curso? Fue entonces cuando la maquinaria comenzó a andar. El cerebro se activa más de lo habitual y los cinco sentidos están atentos a cualquier señal y, así, en una pequeña librería de Madrid apareció el tesoro sobre el que se construyó este proyecto. Me refiero al libro ¿Qué es la libertad? de Renata Bueno (Thule Ediciones), una lectura de corte infantil con una temática muy profunda y en principio difícil de transmitir a los pequeños. El reto estaba servido. ¿Cómo enseñar a un grupo de niños de 6 y 7 años un concepto como es el de la libertad? La sencillez y la belleza de las ilustraciones sirvieron de inspiración y el conjunto de muchas mentes pensantes sentaron los cimientos del proyecto para crear y construir lo que luego sucedió.
Fases del proyecto
La temática de la libertad se hizo presente en algunas de las áreas que se impartían en los cursos de 1º y 2º de Primaria, mientras que La Semana Cultural marcó el inicio con una serie de actividades enfocadas desde distintas asignaturas.
1) Motivación:
En un primer momento se trató de captar la atención de los niños a través de una historia, un relato fantástico sobre el que se reflexionaría realizando un primer acercamiento al concepto de libertad. Se eligió el cuento El tigre sin color, que relata la historia de un tigre blanco y negro que vivía encerrado en un zoo y al que nadie podía pintar pues los colores resbalaban en su piel. Sólo Chiflus, el pintor chiflado consiguió imprimirle colores con sus pinceles al susurrarle al oído: “En sólo unos días volverás a ser libre”. La alegría que el tigre sentía al pensar en su libertad hizo que el color regresase a su piel.
2) ¿Qué sabemos? ¿Qué debemos saber?
Una de las actividades planteadas fue la consulta a los padres: ¿Qué era para ellos la libertad? Se les entregó un formato donde podían escribir, dibujar, pegar imágene... Con la información recogida los niños leyeron la opinión de sus padres y entre todos las comentamos, elaborando además murales de aula con toda esta información.
3) Búsqueda de fuentes de información
Del mismo modo los padres tuvieron que ayudar a los niños en casa a buscar comentarios de famosos o personajes de la humanidad asociados a la libertad. ¿Qué opinarían ellos? Los resultados fueron variopintos y los niños conocieron figuras como M. Gandhi, Mandela, Rosa Parks o Malala Yousafzai. Fue emocionante verles aplaudir de “motu propio” cuando se explicaban las historias personales detrás de alguno de estos personajes.
4) Organización y puesta en marcha del trabajo
Conocidos los distintos puntos de vista sobre la libertad, estaban preparados para crear su propia bandera de la libertad. En un A4 cada uno dibujó su diseño propio y le añadió colores. A continuación, explicaron por qué habían representado según qué cosas o por qué habían utilizado determinados colores. Escuchamos explicaciones como: “Le he puesto azul porque el cielo es como la libertad, tú puedes decidir qué forma tiene cada nube para ti”. Se hizo una votación y, en equipos cooperativos, reprodujeron las banderas elegidas con las indicaciones dadas por los creadores de las mismas.
5) Desarrollo de propuestas. Trabajo interdisciplinar.
En la asignatura de Música:
- Los niños expresaron con su cuerpo, a través de la música y la pintura qué era la libertad para ellos. Se hicieron granden murales colectivos donde pudieron plasmar sus creaciones. Sólo tenían que seguir dos premisas: pintar sabiendo que luego vendrían otros compañeros a continuar la obra y complementar, añadir, modificar el trabajo de los demás sin destruirlo ni eliminarlo.
- Un “Arroz con leche” (Factoría K de Libros) muy especial se convirtió en un juego donde los niños pudieron entonar esta melodía tradicional con una letra muy distinta a la ya conocida. Este juego de corro fue el elemento de apertura y cierre de la performance final.
- El movimiento y la danza aunaron todas estas visiones y nos ayudaron a entender este concepto utilizando materiales que los niños exploron y manipularon con su propio cuerpo:
a) El mar ofrece elementos muy diversos: olas que se pueden crear con telas, molinillos de viento que rueden con la brisa marina, cintas de colores que se ondulen como las anguilas en el océano, o pañuelos de colores que se pierdan en el fondo del mar.
b) Los aros se convierten en círculos. ¿Qué hacemos con ellos? Los aros flotan, ruedan se cruzan, suben y bajan, se acercan y se alejan, son grandes y son pequeños.
c) Los árboles son el elemento estático. Nos ofrecen las raíces. Un lugar al que volver y a partir del cual podemos movernos y crecer. Libertad es moverse con la seguridad de tener un lugar tuyo propio al que volver cuando se necesite un espacio de reflexión y descanso.
d) Las pompas de jabón se convierten en balones gigantes de playa. Los hacemos rodar, los elevamos, miramos a través de ellos, nos escondemos entre los balones…
f) Nos transformamos en letras y las letras salen del papel para saltar, girar, moverse de un lado a otro y volver a formar la palabra que hace posible que todos puedan expresarse de forma individual a través del movimiento, respetando siempre el espacio de los demás.
g) El lápiz rojo que siempre desaparece el primero del estuche de pinturas dibujará líneas y figuras que podremos crear con nuestro cuerpo, con cintas, con cartón.
h) El viento corre y corre y los niños corren con él y para un niño, correr es libertad.
i) Las caricias de la madre son representadas por pañuelos, un círculo que rodea y protege la intimidad de esas caricias. El amor de una madre hará que el niño crezca seguro de sí mismo, en un ambiente libre, donde los límites se marquen siempre con claridad y desde el cariño más profundo.
Conclusiones
Trabajo cooperativo en el aula sí, pero antes de eso trabajo cooperativo entre los maestros.
Una idea puede servir de hilo conductor pero se necesitan muchas otras para enriquecer y completar un gran proyecto. Partiendo de una lectura común del cuento y de un PowerPoint con las ideas para la performance final se repartieron tareas.
Los maestros eligieron su icónica manera de representar la libertad: círculos, árboles, el mar, las pompas de jabón, el lápiz rojo, la lluvia, las letras, el viento, las caricias de una madre. Plasmar la libertad puede ser muy complejo o muy simple. El guión creado en principio fue tomando forma al añadir las reflexiones de cada uno de ellos. Se realizó, por otro lado, un Stop Motion relacionando los elementos elegidos con los alumnos: se crearon unas secuencias de imágenes y fotografías donde la música y los elementos plásticos dieron un nuevo enfoque al concepto de libertad..