Un escape room educativo es una experiencia de gamificación maravillosa que supone la combinación de metodologías o técnicas metodológicas como el aprendizaje cooperativo, el aprendizaje basado en problemas, el pensamiento crítico o la capacidad resolutiva. Además, fomenta el empleo de habilidades de comunicación, la cohesión de grupo, el respeto hacia los compañeros, el desarrollo de competencias sociales, la imaginación y, lo más importante, la motivación total del alumnado. Bajo mi punto de vista, ofrece la oportunidad perfecta para trabajar los contenidos de las diferentes materias bilingües y, por esta razón, decidí proponer uno aprovechando la época navideña al equipo de seis profesores que forman parte del Proyecto Bilingüe del centro.
Para la creación y el diseño de la actividad nos inspiramos en la obra literaria de Charles Dickens ‘A Christmas Carol’. Los profesores implicados creamos una atmósfera única, diseñamos las pruebas basándonos en el argumento del cuento y en el contexto histórico, añadimos música de fondo, ¡algunos hasta nos disfrazamos de distintos personajes! Así, el instituto se convirtió en el Londres victoriano de 1843, año en el que Dickens publicó esta novela corta.
Las pruebas
Los alumnos de 1º a 4º de Secundaria, divididos en pequeños grupos, debían ayudar a Ebenezer Scrooge a descubrir el verdadero significado de la Navidad. Para ello, ayudados de un mapa, tenían que realizar un recorrido por distintos lugares de Londres siguiendo la trama original de la historia y superar seis pruebas.
Introducción
En primer lugar, los alumnos veían un vídeo de introducción en el que se les explicaba el contexto de la historia y las normas del juego. A continuación, debían superar tres pequeñas pruebas en inglés en las que se repasaba el vocabulario de navidad relacionado con el cuento y la gramática de los tiempos verbales: presente, pasado y futuro (haciendo referencia a los tres fantasmas).
Una vez superada esta prueba comenzaba el viaje: los alumnos acompañarían a Scrooge en su recorrido con los tres fantasmas.
Fantasma de las navidades pasadas: parte I
Para trabajar las matemáticas, los alumnos tenían que calcular qué anillo podía comprarle Scrooge a su prometida Belle utilizando monedas de la época victoriana.
Fantasma de las navidades pasadas: parte II
En esta prueba se trabajaba la historia: los alumnos debían investigar hechos importantes de la era victoriana: personajes históricos, la Revolución Industrial, revoluciones sociales, etc., para conseguir abrir los candados de una caja que les llevaría al siguiente lugar del recorrido.
Fantasma de las navidades presentes: parte I
Scrooge descubre al segundo fantasma que le mostrará a Scrooge escenas de festividad que incluyen la cena de Navidad de su sobrino y de su pobre empleado, Bob Cratchit. De esta manera, esta prueba se centra en el estudio de dietas y el cálculo de calorías de diferentes alimentos y así repasamos la materia de biología.
Fantasma de las navidades presentes: parte II
Para trabajar la materia de Física y Química seguimos con las fiestas de Navidad que Scrooge observa acompañado del fantasma del presente. Los alumnos tenían que calcular la masa, el volumen y la densidad de cajas de regalos y ordenarlas siguiendo unas instrucciones. Esta prueba les llevaría al siguiente fantasma…
Fantasma de las navidades futuras: prueba final.
El terrible fantasma del futuro muestra a Scrooge la horrible y espantosa imagen de su propia tumba. Los alumnos necesitaban completar el esqueleto de Scrooge y para ello debían realizar un circuito (para trabajar la Educación Física) y conseguir las tarjetas con el nombre de los músculos y huesos.
Al final, Scrooge aprende la lección y al despertar decide convertirse en un hombre generoso y amable que agradece su ayuda al equipo más rápido con chocolatinas y caramelos.