¿Cómo conseguir crear conciencia sobre las consecuencias medioambientales, económicas, éticas y sociales del desperdicio de alimentos entre los estudiantes de 2º de ESO? Para responder a esta pregunta, propuse a mi alumnado de Educación Plástica una actividad para fomentar la lectoescritura y desarrollar la imaginación, mientras trabajábamos las competencias propias del área: se trata del proyecto Síndrome de Abundancia.
El cuento como elemento de concienciación
Me parecía interesante combinar un enfoque interdisciplinar para enriquecer la actividad, y comenzamos con la creación de un cuento relacionado con esta temática. La propuesta fue trabajar, inicialmente, en pequeños grupos. En esta primera parte del trabajo, los grupos debían elegir y leer tres cuentos. Se les ofreció una compilación de relatos para que pudieran escoger a su libre albedrío, sin poner cortapisas de autor, época histórica, longitud del cuento… El criterio era: ‘leed, escoged lo que os sugiera y os llame la atención, pero leed’.
Al ser una lectura compartida, entre todos buscaban el vocabulario que desconocían, se explicaban matices que alguno no captaba y la lectura les resultaba más motivadora.
Después, debían inventar su propio cuento, también en grupos. Para ello explicamos en el aula las características formales de este tipo de narración, analizamos la importancia de los personajes, la recreación de espacios, la sucesión en la historia…
La ilustración de sus historias
Sus relatos debían ser una versión de alguno de los tres cuentos leídos, de tal manera que la idea de evitar el desperdicio de comida debía subyacer como parte de la trama o como moraleja. No era fácil pero, al trabajar en equipo, unos complementaban a otros, y surgieron historias muy simpáticas.
La última parte de la experiencia fue individual: una vez terminada la historia, los alumnos realizaron ilustraciones del texto. En ellas imitaban formalmente los cuadros de Modigliani, usando para ello diversas técnicas gráfico-plásticas.
Finalmente debían ‘construir’ el cuento incorporándole la portada, contraportada y las ilustraciones, combinando así el aprendizaje in situ,con el desarrollo de la competencia digital.
Aquí, se pueden ver los materiales usados para esta secuencia didáctica y el desarrollo de la misma.
Interesante estrategia activa que anima a dinamizar mejor los actos educativos para que sirvan para la vida y no para un ratico.