Los estudiantes de 4º de Primaria del CEIP Arturo Dúo en Castro Urdiales (Cantabria) han grabado una serie de clases virtuales de Matemáticas para su compañero Jia que guarda reposo tras una operación. Su profesor Francisco Manuel Sánchez Álvarez nos cuenta esta iniciativa en la que se combina TIC, esfuerzo, empatía, solidaridad y compañerismo. Al mismo tiempo, los estudiantes tienen la oportunidad de trabajar varias de las inteligencias emocionales.
'Clases para Jia' son una serie de clases virtuales donde mis alumnos y yo nos grabamos dando clase y realizando algunas actividades de matemáticas. Estas clases son grabadas y editadas para publicarlas posteriormente en nuestro canal educativo Those Wonderful Minds en YouTube.
Las pusimos en marcha por nuestro compañero Jia que, tras una gran operación, queríamos apoyarle y ayudarle a estudiar durante su recuperación. Como tutor pensé que además de animar a Jia, a sus compañeros les vendría genial para afianzar contenidos matemáticos. Así, los padres de Jia y yo nos pusimos de acuerdo para llevar a cabo esta actividad. Por su parte, han colaborado viendo los vídeos con él y trabajándolos desde casa. Además, el primer examen tras la operación lo realizó desde su salón, a través de Skype, con su madre presente. Conseguimos que se sintiera de nuevo con nosotros.
Asimismo, el resto de la clase quiere aprender más para salir a la PDI (Pizarra Digital interactiva) para explicar más cosas a su compañero. Quieren entender de una mejor manera lo que vemos para así poder explicarlo ellos. No sólo se esfuerzan más, la experiencia requiere mejorar su expresión oral y escrita. Se convierten en maestros y trabajan varias inteligencias como: interpersonal, intrapersonal, lógico-matemática y lingüística.
Trabajando con vídeos
Cuando salen a la pizarra durante la captura del vídeo, grabamos en tiempo real el audio con un micrófono conectado a mi smartphone. Les pido que al mismo tiempo que van escribiendo vayan explicando lo que hacen. Cuando grabamos a varios locutores a la vez, utilizo el programa iRig, pero para grabar la voz de una sola persona, que además se está moviendo para escribir en la pizarra, utilizo un micrófono de pinza Sony que graba en estéreo y HQ.
Existen varias apps para grabar audio, pero en este caso tanto por su calidad como por la facilidad de enviar y recibir archivos empleamos la grabadora que trae el iPhone por defecto: Notas de voz. La captura de vídeo la realizamos con la grabadora que incluye el software de nuestra PDI Smart. Es muy sencillo y registra en alta definición.Ambas grabaciones, audio y vídeo, se unen luego en un programa de edición de vídeo. En casa suelo montar con Final Cut Pro, pero en el cole he querido mostrarles las herramientas gratuitas que existen como iMovie o Windows Movie Maker, siendo este último el que utilizamos. Aunque tiene ciertas limitaciones, es muy intuitivo y cumple con nuestro objetivo de editar vídeos sencillos, uniendo la captura al audio, ajustando volúmenes, creando títulos y añadiendo música.
La actividad ha gustado mucho tanto a Jia como a sus padres y el resto de alumnos, así que seguramente cuando Jia se recupere y vuelva con nosotros seguiremos haciéndolo para los estudiantes que tienen más dificultades como refuerzo.
Compañerismo, solidaridad, empatía, esfuerzo, uso de las nuevas tecnologías... ¿matemáticas aburridas? No, gracias.
Muchas gracias por difundir este tipo de proyectos.
Un saludo de parte de Those Wonderful Minds.