Tras la situación de crisis sanitaria y social vivida por la Covid-19 y el esfuerzo realizado por parte de la comunidad educativa para acometer en estas circunstancias el desarrollo del curso escolar, es necesario programar un periodo de adaptación para que el alumnado que se incorpore al primer curso del segundo ciclo de Educación Infantil lo haga de forma progresiva y continuada durante las primeras dos semanas de actividades lectivas. Además, sin perjuicio del derecho de las familias a que sus hijos se incorporen desde el primer día de comienzo de las mismas.
Este periodo garantizará que al inicio de la segunda semana se haya incorporado al menos el 50% del alumnado. El periodo de adaptación es el proceso por el cual el niño va formando y preparando, desde el punto de vista de los sentimientos, la aceptación de un medio nuevo, la escuela. La entrada a un centro escolar supone un cambio importante, implica una salida del medio familiar en el que se encuentra seguro y protegido, en el que además tiene un papel o rol determinado, a un medio mucho más amplio que es la escuela, en el que las relaciones son distintas y que para él se presenta como algo desconocido.
Aparte de las tareas y actividades propias de acogida, presentación y de inicio de curso, tras la situación vivida por la pandemia, es prioritario cuidar la acogida del alumnado atendiendo en especial a aquellos que vivan situaciones de mayor vulnerabilidad emocional y social. Por ello, durante las primeras jornadas se realizarán actividades para trabajar las emociones, que recogeremos dentro del Plan de Acción Tutorial (PAT).
¿Qué enseñar?
Los objetivos expresan las capacidades que han de desarrollar los alumnos al finalizar el periodo de adaptación y se formulan indicando el tipo y grado de aprendizaje previsto.
- Familiarizarse con las medidas higiénico-sanitarias creando un entorno saludable y seguro.
- Conocer y respetar las medidas organizativas de seguridad en el aula, patios, accesos, comedor para prevenir los riesgos de contagio.
- Fomentar el desarrollo progresivo de su autonomía respetando las medidas de seguridad.
- Descubrir y conocer a los compañeros que forman el grupo de convivencia estable y su pequeño grupo de juegos.
- Conocer al tutor y el docente de apoyo creando vínculos afectivos.
- Fomentar el gusto por el colegio y por las actividades que en él se realizan.
- Expresar las emociones, aumentar la confianza y compartir lo vivido y sentido durante la pandemia.
¿Qué hay que enseñar?
Los contenidos que han de trabajarse para conseguir los objetivos propuestos
se organizarán por áreas entendidas como ámbitos de actuación de actitudes, procedimientos y conceptos.
1. Hábitos de salud e higiene:
- Higiene de manos: agua, jabón, solución hidroalcohólica, papel de un solo uso.
- Higiene respiratoria: al toser o estornudar cubrirse usando el codo o un pañuelo desechable.
- Uso de mascarilla como medida complementaria y recomendable para las entradas y salidas del alumnado y siempre que no estén en el grupo estable.
- Medidas organizativas en el aula y en el patio: grupo de convivencia estable, pequeños grupos estables de socialización y juego.
- Identificación y organización de los equipos de juego y del material fungible de uso individual.
- Manipulación de los diferentes materiales del aula (fungible, juguetes, materiales didácticos) respetando las medidas de higiene.
- Desplazamientos controlados minimizando los contactos.
- Utilización de los espacios al aire libre para la realización de actividades educativas.
- Creación del rincón de los ‘juguetes sucios’ para separar los que se deben limpiar.
- Realización de juegos para adaptarse al grupo, al espacio y al horario.
- Expresión de emociones y ayuda para superar la angustia, el temor, la duda, etc.
¿Cómo enseñar?
Tomaremos todas aquellas decisiones de la práctica docente relacionadas con el periodo de adaptación, con el fin de posibilitar el aprendizaje del alumnado y el logro de los objetivos planteados. Las actividades de enseñanza y aprendizaje serán globalizadas y estarán secuenciadas y temporalizadas. Las dividiremos en tres tipos: actividades de acogida, de higiene y salud y para trabajar las emociones.
1. Actividades de acogida:
Juegos para conocer a “Coronavirus”. Dialogamos con los niños acerca de la preocupación que sentimos por la aparición de esta enfermedad. Les explicaremos que se trata de un virus tan pequeño que no podemos verlo a simple vista pero que puede hacer mucho daño a las personas. Algunas sugerencias de actividades serían las siguientes:
- Dibujar al virus como cada niño lo imagina.
- ¡Somos detectives! Investigamos qué es el coronavirus, cómo se contagia y cuáles son los síntomas.
- Escuchamos el cuento de Manuela Molina, cuyo protagonista es el coronavirus, un familiar que cuando viene de visita trae unos síntomas que el niño puede fácilmente reconocer. O el cuento de Natalia Pedraza, explicado por niños.
- Juegos de presentación, como recitar la retahíla: Pajarita blanca, pajarita azul, ¿cómo te llamas tú?… Jugamos al ‘Veo, veo’, utilizando la fórmula: “veo, veo, ¿qué ves?, a una niña, ¿qué niña es?, es una niña que... (describimos algo muy significativo de su ropa o de sus características físicas)”.
- Saludamos con los pies, con los codos…
- Creación de los grupos y elección de su identificación. Los niños se distribuirán en pequeños grupos estables de socialización y juego (con 20 alumnos, podemos establecer 5 grupos) que se identificarán mediante una serie de dibujos. Cada uno de estos dibujos aparecerá en un cartel coloreado y plastificado. En cada uno de estos carteles colocaremos las fotos de los niños que forman parte de ese grupo. Cuando haya finalizado la incorporación y el grupo-aula esté completo se realizarán actividades que refuercen el concepto de pertenencia de los niños a cada grupo.
- El tren de los equipos. Confeccionamos un tren con cinco vagones de colores, cada uno correspondiente a un día de la semana. En cada vagón, colocaremos las fotos de los niños que componen cada equipo.
- Preparamos un pequeño carnet con la foto de cada niño, en el que se escribirá su nombre y el de su grupo.
- Mostrar a los niños su aula de convivencia estable y el por qué de ella. Los distintos grupos y rincones en los que se encuentra organizada, así como los juguetes y materiales que se utilizan en cada rincón y la forma en la que se deben guardar los mismos. Crearemos el ‘rincón de higiene’ y el ‘rincón de los juguetes sucios’. En el segundo colocaremos un barreño con agua jabonosa y un pictograma que indique que están sucios y no se pueden usar hasta que se limpien y desinfecten.
- Organizaremos el material de uso individual como ceras, pinturas, lápices, gomets… Los colocaremos en recipientes identificados con el nombre o foto del niño.
- En cuanto al uso del ordenador, tablet, pizarra digital, etc; al terminar de utilizarlos se limpiarán con gel desinfectante.
2. Actividades de higiene y salud:
Realizaremos el lavado de manos con agua y jabón (o solución hidroalcohólica) en las siguientes situaciones:
- Al empezar y al finalizar la jornada escolar.
- Después de ir al lavabo.
- Antes y después de ir al váter.
- Después de toser, estornudar o sonarse la nariz.
- Antes y después de salir al patio.
- Después de cada contacto con fluidos corporales de otras personas.
- Antes y después de ponerse o retirarse una mascarilla.
- Siempre que las manos estén visiblemente sucias.
- Después de usar o compartir algún juguete o equipo electrónico.
Explicaremos a los niños que al toser o estornudar deben cubrirse usando el codo o un pañuelo desechable; y después lavarse las manos con agua y jabón o con solución hidroalcohólica bajo la idea de “Sé un héroe y tose como Batman”. No realizaremos, por el riesgo que conlleva, el cepillado de los dientes. Los niños usarán la mascarilla como medida complementaria y recomendable para las entradas y salidas y siempre que no estén en el grupo estable. Explicaremos, con apoyo visual, el uso correcto y que nunca debe llevarse al cuello, frente o debajo de la nariz.
3. Actividades para trabajar las emociones:
Utilizaremos las actividades y recursos disponibles en el Plan Volvamos+cercanos de la Consejería de Educación y Cultura de la Región de Murcia.
Escucharemos el cuento ‘Cosas que vienen y van’ de Beatrice Alemagna y, después, jugamos y experimentamos qué se siente al lanzar pompas y ver cómo se desplazan por el aire, aparecen y desaparecen.
También explicaremos a los niños qué son las caricias físicas (abrazos, besos) y que las cosas positivas que hacemos por otras personas también son caricias (decir palabras bonitas, ayudar, hacer pequeños regalos). Además, crearemos un rincón de las emociones, ‘El virus colorín’ nos enseña que es mejor compartir tanto las penas, los miedos, las alegrías que guardárselos para sí mismos, igual que jugar uno solo es más aburrido que cuando juego con amigos.
¿Qué hemos aprendido?
Reflexionaremos sobre las evoluciones de los alumnos a lo largo del periodo de adaptación y estableceremos indicadores, procedimiento e instrumentos de evaluación, tanto del proceso de enseñanza como de la práctica docente. Realizaremos una evaluación inicial donde se recogerán los datos relevantes sobre el proceso de desarrollo de cada uno de los niños, información proporcionada por los padres, y en su caso, los informes médicos, psicológicos, pedagógicos y sociales que revistan interés. Esta evaluación inicial se completará con la observación directa por parte del tutor del grado de desarrollo de las capacidades básicas durante el periodo de adaptación. Asimismo, se llevará a cabo una evaluación continua a través de la observación sistemática realizada en las distintas actividades de enseñanza y aprendizaje planificadas para el periodo de adaptación. Anotaremos los progresos alcanzados en una guía de observación, donde evaluaremos la llegada, estancia y salida del centro.
Teniendo en cuenta que las actividades e instrumentos de evaluación han de ser lo más diversos posibles, también utilizaremos el diario de clase para registrar las conductas, situaciones y comportamientos de los niños, las conversaciones y el análisis de sus producciones. Por último, una evaluación final, que nos informará del grado en que se han conseguido los objetivos. Todo ello, sin olvidar realizar una evaluación del proceso de enseñanza, del tutor y el docente de apoyo, los espacios, materiales, tiempos, relaciones con las familias.
Muy buena informacion!
Muchas gracias para las ideas.
Es un excelente trabajo mis más sinceras felicitaciones