Jenifer L. Johnson y Marion Charreau son docentes y han trabajado en el aula en algún momento de sus diversas carreras desde la Educación Secundaria a la Universidad. Juntas han creado ‘The Storyboard Method’, un método pensado para trabajar nuevas formas de pensar, comunicarse y conectarse en diversos ámbitos como el educativo o el empresarial. En su libro, ‘Piensa y comunica tus ideas con The Storyboard Method’ explican claramente en qué consiste y exponen los pasos necesarios para llevarlo a cabo.
Pregunta: Uno de los mayores problemas que encuentran los profesores en el aula es la pérdida de atención por parte de los estudiantes, ¿este método podría ayudarles? ¿Cómo?
Respuesta: El uso correcto, creativo y estratégico de la tecnología portátil en las aulas es una cuestión que la administración de cada escuela debe afrontar. Un solo docente con un puñado de estrategias caseras no puede resolver el problema sin perder la cabeza.
Sin embargo, una vez que esto queda resuelto, se puede aplicar ‘The Storyboard Method’ (TSM) puede cautivar la atención de los estudiantes al contenido que los docentes les presenten. Ayuda a convertir la información en una narración, en una historia cautivadora. Muchos docentes ya saben cómo cautivar a sus estudiantes y puede que no necesiten ninguna ayuda; otros querrán tener algunas herramientas nuevas a su alcance para mantener un ritmo de aprendizaje fluido y lograr que los estudiantes les presten atención.
Recomendamos experimentar con el método y familiarizarse con las herramientas usándolas para planificar una sola lección, una serie de lecciones o un tema que requiera una atención especial; que se permitan el lujo de dedicar tiempo a probar los nuevos tipos de pensamiento y acciones que cada herramienta les invita a experimentar. En lugar de ser los que guían, pueden dejarse guiar durante unas horas. Los resultados, la narración y las imágenes que se les ocurran, les sorprenderán y probablemente les darán una inyección de energía. Y lo mejor ocurre cuando lo prueben en el aula con los alumnos.
P: ¿‘The Storyboard Method’ guarda similitudes con el visual thinking?
R: Pensar visualmente (traducción literal de visual thinking) es algo que hacemos cada día, a menudo, sin darnos cuenta. ‘The Storyboard Method’, sin embargo, es un método con pasos y herramientas. De todos, el tercer paso, el de visualizar, es el que tendría más conexión con el pensamiento visual. Se trata de dibujar las ideas, usando el lenguaje visual, para crear un storyboard o guion verbal y visual de la narración o presentación.
P: Una de las herramientas está relacionada con las reglas de oro para hacer una diapositiva, ¿creéis que es una herramienta eficaz para las clases?
R: La diapositiva no es nada más que un lienzo en blanco iluminado. En teoría es un espacio que espera ser llenado cuidadosamente con nuestra creatividad. Lo que ocurre es que, a lo largo de nuestra historia, hemos convertido ese lienzo en un transmisor de dolor y sufrimiento. Esta herramienta en particular fue creada para ayudarnos a aliviar un poco de nuestro dolor colectivo: cuando alguien proyecta una diapositiva repleta hasta el límite de palabras, líneas, flechas, frases y gráficos y comienza a leerla a su audiencia palabra por palabra. O peor aún, cuando alguien comienza a explicar algo que ni siquiera está en la diapositiva y los cerebros del público comienzan a sufrir un cortocircuito y no consiguen encontrar el sentido de lo que escucha o lo que ve.
La buena noticia es que hay otro camino. Y, si eres una de las personas que hace diapositivas y material visual de apoyo geniales, entonces estarás en lo correcto.
La idea que está detrás de la herramienta ‘Reglas de oro para componer diapositivas’ es ayudar a las mentes de los espectadores a disfrutar de los elementos visuales. Recuerda que las diapositivas o el soporte visual que usemos deben acompañar nuestra narración, acentuar algunas partes o ilustrar palabras o metáforas que la narración evoque. Esta herramienta nos enseña cómo simplificar e impactar al público con imágenes sin abrumarlo ni aburrirlo. Las diapositivas o el apoyo visual nunca deben entrar en conflicto o competir con lo que diga el narrador.
P: ¿Qué podría hacer un profesor para crear diapositivas que llamasen la atención del alumnado?
R: En primer lugar, tener una narración clara y, en segundo lugar, tener claro el diseño. Las diapositivas que llaman la atención son sencillas, visuales y ayudan a captar el mensaje del docente.
Para crear diapositivas, el profesor podría preguntarse: ¿cuál es la idea principal que quiero transmitir? ¿Qué me evoca la idea que quiero transmitir? (intentando traer una imagen a su mente) Por último, se preguntará: ¿esta imagen ayudará a que mis estudiantes comprendan el mensaje? Si la respuesta es sí, podrá seguir adelante con el diseño teniendo siempre en mente que la imagen tiene que tener el protagonismo: si se añade algún texto será solo una palabra clave o una frase.
P: ¿Qué debe saber un profesor para decidir qué contenido contar y cuál omitir?
R: A la hora de elegir el contenido, solemos tener el mismo problema, seamos profesores, managers o científicos: queremos decir demasiado. Puede ser porque nos apasiona nuestro tema o porque pensamos que cuanto más decimos, más nos respetarán.
Cualquier persona que comunica debe conocer a su público. Saber lo que ya saben del tema, lo que creen saber y lo que ignoran. Debe saber cómo piensan, qué les motiva sobre este tema, que podría privarles de escuchar con atención y cómo hablan del tema. Y debe preguntarse si las palabras que usa van a conectar con su vocabulario, el vocabulario del público, si están a su alcance y si van a despertar su curiosidad.
Para elegir nuestro contenido, debemos poner de lado lo que nos parece importante a nosotros y mirar la singularidad de las personas que tenemos delante. Es un nuevo punto de partida. El primer paso de The Storyboard Method.
P: ¿Creéis que el método también podría servir a los estudiantes? ¿De qué manera?
R: El método incluye herramientas que se pueden emplear fácilmente tanto en situaciones de escasez de recursos como en las de gran riqueza de recursos. Implican la mente y el cuerpo: las piernas, las manos, los ojos, la boca y los oídos. De hecho, una de las razones por las que el método tiene tanto éxito en entornos adultos es porque las herramientas activan muchos de los talentos y habilidades que tenemos, pero rara vez se nos estimula a usarlas o dejamos de usarlas una vez que hemos crecido. Otra razón es que a los niños y a los adultos les encantan las herramientas y los procesos que tienen el espíritu de un juego en el que se usa la mente y luego se ven resultados claros físicamente a lo largo de todo el camino.
TSM activa los talentos naturales del cerebro y de toda la persona. Algunas de las herramientas exigen leer y escribir y otras no. Esto es lo que enseñamos a los educadores en nuestras sesiones de formación sobre el uso de las herramientas en el aula.
- Piensa y comunica tus ideas con el Método Storyboard