Ally Vispo es escritora, divulgadora y uno de los principales referentes del movimiento Zero Waste en España; una filosofía de vida que defiende el ‘residuo cero’ o la reducción máxima de la cantidad de basura que generamos los seres humanos en los hogares. Acaba de publicar ‘Zero Waste para salvar el mundo’, una guía ilustrada en la que aporta algunas claves para conseguirlo. ¿Cómo puede trasladarse al aula? ¿Debería enseñarse la sostenibilidad como una asignatura más? ¿Por qué es importante educar en el respeto al medioambiente desde la infancia? Responde en esta entrevista.
Pregunta: ¿Qué significa llevar un estilo de vida sostenible?
Respuesta: Para mí, significa hacer todo lo que puedes en tu día a día por tomar las mejores decisiones de consumo y estilo de vida, mientras luchamos por crear un sistema más respetuoso con el medioambiente, los animales y las personas. Se trata, desde mi punto de vista, de combinar las acciones individuales diarias con la responsabilidad que todos y todas tenemos de exigir a las instituciones los cambios necesarios.
P: ¿Por qué considera importante concienciar desde edades tempranas sobre ello?
R: Si se hubiera invertido en educación y concienciación desde siempre, no habríamos llegado a este punto. Tenemos poco tiempo para evitar una catástrofe climática y esto ha ocurrido porque todos y todas lo hemos permitido; en mayor parte, porque no estábamos informados ni concienciados sobre el tema (yo incluida). Cuando educamos desde edades tempranas, estamos creando personas responsables, cívicas, éticas, concienciadas y compasivas, y un mundo lleno de personas así no puede ir mal.
P: ¿Cómo se puede concienciar desde los coles a generar menos basura o fomentar una conciencia ecológica?
R: Para empezar creo que la sostenibilidad debería incluirse de alguna forma, ya sea como asignatura individual o como parte del temario, porque es algo igualmente (o más) importante que muchas cosas que nos enseñan. Es, literalmente, de importancia vital. Hablar a los estudiantes de cómo funciona el mundo, cómo pueden realizar acciones divertidas que pueden ayudar al planeta, y cómo pueden crear un mundo mejor, les enseña el valor de la responsabilidad y a entender que tienen el poder de crear un mundo mejor para todos y todas.
P: Movimientos como el iniciado por Greta Thunberg nos ha hecho darnos cuenta de la importancia de cuidar el planeta de cara a las futuras generaciones pero, ¿qué podemos hacer para combatir el cambio climático desde las aulas?
R: Sobre todo, los docentes tienen la responsabilidad de enseñar e inculcar unos ciertos valores y actitudes necesarios a sus alumnos (e idealmente, involucrar a los padres también) para que sean conscientes de que somos, al mismo tiempo, el problema y la solución a la situación medioambiental en la que nos encontramos. Informar a las familias sobre la importancia de reducir la utilización del plástico de un solo uso, de la alimentación libre de productos animales y de las acciones individuales diarias que son posibles, al mismo tiempo que les animamos a alzar la voz frente a las instituciones para exigir lo que creen correcto. De hecho, me escriben muchos profesores y profesoras enseñándome proyectos que están intentando integrar en sus clases y colegios. Me da mucha esperanza.
P: ¿Y desde casa?
R: Desde casa podemos tomar acciones individuales muy sencillas, como evitar el plástico de un solo uso comprando a granel, llevando nuestras propias bolsas reutilizables al supermercado, con una alimentación libre de productos animales (podemos reducir nuestro impacto medioambiental hasta en un 73% llevando este tipo de dieta), utilizando transporte público, reduciendo el consumismo y dando nuestro dinero a empresas que comparten nuestros mismos valores.
Pero, sobre todo, me gusta recalcar que las acciones individuales deben combinarse con una exigencia a las instituciones de que tomen las medidas pertinentes para cambiar el sistema, ya que son los únicos que pueden hacerlo. Esto puede hacerse concienciando, informando, dando ejemplo, escribiendo correos y realizando llamadas.
P: ¿Qué supone la filosofía Zero Waste?
R: Me gusta siempre recalcar que el ‘Zero Waste’ o ‘Residuo Cero’ es simplemente un concepto. Es imposible no crear ningún tipo de residuo, y mucho menos, en el actual sistema que se centra alrededor de la conveniencia, el beneficio y el usar y tirar. Se trata simplemente de vivir con consciencia y hacer lo que podemos en cada situación, sin aspirar a ser perfectos (ya que es imposible), pero al mismo tiempo tomando acciones constantes para reducir nuestro impacto medioambiental. El residuo va mucho más allá del plástico.
P: En su libro ofrece trucos y consejos sencillos para poner en práctica en todos los ámbitos del día a día. ¿Qué medidas considera imprescindibles en el entorno educativo?
R: La verdad es que creo que algo interactivo, como aplicaciones, juegos o incluso programas de televisión aptos para todas las edades, sería muy útil para todo el mundo, pero sobre todo para las aulas. Debería crearse algo así cuanto antes.
"la empatía está directamente relacionada con las actitudes respetuosas con el medioambiente"
P: ¿Están conectadas la educación emocional con el reciclaje y el estilo de vida saludable?
R: Considero que la empatía está directamente relacionada con las actitudes respetuosas con el medioambiente. Cuando educamos a nuestros hijos en la empatía, son capaces de ver cómo sus acciones siempre tienen un efecto en las demás personas, los animales y la naturaleza, les enseñamos a ver el mundo desde la perspectiva y los ojos de otros seres vivientes, y a darse cuenta de que tienen la responsabilidad moral de tratar a este planeta con respeto. Cuando crías desde la empatía, creas mentes maravillosas y responsables que solo pueden crear un mundo mejor.
- Vispo, Ally (Autor)