Aunque no seamos conscientes de ello, la inteligencia artificial forma ya parte de nuestras vidas; también de las de los más pequeños. De hecho, a través de los asistentes de voz, las recomendaciones personalizadas o el uso de plataformas de aprendizaje adaptativas los menores conviven con ella sin darse ni cuenta. Por eso, es importante que sepan en qué consiste, cómo utilizarla y cuáles son sus riesgos desde edades tempranas. Precisamente ese es el objetivo del cuento infantil que ha escrito la divulgadora y experta en esta tecnología Nerea Luis Mingueza. Con el título ‘Mi primer libro sobre inteligencia artificial’ (Anaya), está dirigido a pequeños a partir de 5 años, a los que ayuda a entender en qué consiste, cómo formará parte de su futuro y cómo se relaciona con otras disciplinas como la robótica. No obstante, todo ese conocimiento también pasa por ser conscientes de los riesgos que entraña. 

Pregunta: ¿De qué forma impacta la IA en los niños de hoy en día?

Respuesta: La IA ya forma parte de la vida cotidiana de los menores, incluso sin que sean conscientes de ello: desde asistentes de voz como Alexa o Siri hasta recomendaciones personalizadas en plataformas como YouTube y TikTok, los algoritmos de IA están personalizando sus experiencias digitales. También tiene impacto en la educación, con herramientas como Duolingo o ChatGPT, que personalizan el contenido según su progreso o sus preguntas. Igualmente, los videojuegos la utilizan para mejorar la jugabilidad y generar experiencias más inmersivas.

P: ¿Qué es lo que deben saber de ella?

R: Deben entender que la inteligencia artificial no es mágica, sino un conjunto de sistemas de base tecnológica que aprenden a partir de datos y patrones. Por ello, es importante que sepan que no todo lo que dice una IA es cierto (puede cometer errores o generar información incorrecta) o que los algoritmos pueden estar sesgados, porque aprenden de datos históricos de los seres humanos. También deben tener pensamiento crítico, cuestionando las respuestas de la IA y aprendiendo a verificar información. Y, por supuesto, pueden usarla como una herramienta creativa, explorando cómo funciona en el arte, en la música o simplemente para aprender sobre un tema nuevo.

Niños IA

P: ¿A qué edad es recomendable que los menores se adentren en ella?

R: Desde los 5 o 6 años pueden empezar a conocer conceptos básicos a través de juegos o lecturas sencillas que expliquen cómo funcionan las máquinas inteligentes. Un poco más adelante, a partir de los 8 años, es posible experimentar con herramientas educativas que les ayuden a desarrollar el pensamiento computacional además de jugar con kits de robótica programables. Desde los 12 años en adelante, exploran cómo funciona la inteligencia artificial en más profundidad, y pueden seguir trabajando sus habilidades de programación.


"Los sistemas de IA pueden influir en el comportamiento y preferencias de los menores sin que se den cuenta"

P: ¿Cómo le pueden sacar partido?

R: En primer lugar, la IA debe ser una herramienta de apoyo que no reemplace la capacidad de investigar y razonar. Dicho esto, sirve para fomentar el aprendizaje personalizado. Hay aplicaciones como Khan Academy, Duolingo o ChatGPT que ayudan a aprender a su propio ritmo. En segundo lugar, pueden poner en marcha su creatividad de muchas maneras diferentes: generar arte con IA con herramientas como Midjourney o Freepik, escribir historias con ChatGPT, Gemini o Copilot o crear música con Suno o Udio. En tercer lugar, los menores aprenden programación con plataformas como Scratch o herramientas como Google Teachable Machine, para entrenar modelos sencillos. E, incluso, exploran el mundo realizando preguntas a asistentes de inteligencia artificial para entender conceptos de ciencia, historia o matemáticas.

Niños IA

P: ¿Cuáles son los principales riesgos para los más pequeños?

R: La desinformación es uno de los principales, ya que es posible que genere respuestas incorrectas o sesgadas. También hay que tener en cuenta que muchas herramientas recopilan datos personales, lo que es un problema si no hay supervisión. Por otro lado, las recomendaciones personalizadas hacen que pasen demasiado tiempo en plataformas digitales, lo que puede provocar una adicción al contenido online además de que los sistemas de inteligencia artificial pueden influir en su comportamiento y preferencias sin que se den cuenta.

"Es importante formarse en ética y sesgos de la IA para enseñar a los alumnos a utilizarla de manera responsable"

P: ¿Cómo vislumbra el futuro de los menores con el auge de la inteligencia artificial?

R: Crecerán en un entorno donde la IA será una herramienta cotidiana, desde la educación hasta el entretenimiento y el trabajo. Por lo tanto, la alfabetización en IA será tan importante como aprender a leer y escribir. Veremos nuevas oportunidades de empleo para las futuras generaciones, muchas de ellas relacionadas con la ética y el diseño de IA responsable.

P: ¿Cómo deben formarse los docentes para aplicarla en el aula?

R: En primer lugar, comprender los conceptos básicos de IA sin necesidad de ser expertos en programación. Igualmente tienen que aprender a usar herramientas con IA en los colegios e institutos como Google NotebookLM, ChatGPT… 

Por otro lado, es importante formarse en ética y sesgos de la IA para enseñar a los alumnos a utilizarla de manera responsable, además de interactuar de forma crítica con ella, identificando sus límites y riesgos. Igualmente, es esencial incorporarla en proyectos educativos para que el alumnado experimente con ella de forma práctica.