“La FP Básica ha sido el patito feo del sistema educativo. En muchos centros no se les permitía hacer orla, ni participar en las graduaciones del resto de estudios terminales”, explica Miguel Ángel Ronda, un docente que durante años ha impartido clase a estudiantes que cursaban este tipo de Formación Profesional. Ahora la FP Básica está consiguiendo un mayor reconocimiento, pues es una opción educativa ideal para ‘reenganchar’ a estudiantes que han experimentado el fracaso escolar al sistema educativo y motivarles para que quieran seguir formándose.
Este profesor malagueño ha estado nominado entre los 10 mejores profesores de Formación Profesional de España en los IV Premios Educa Abanca y ha ganado dos premios en la pasada edición de SIMO EDUCACIÓN 2022 por sus buenas prácticas en el aula. Uno de ellos, el Premio a la Mejor Experiencia de Sostenibilidad, lo consiguió gracias a uno de sus proyectos estrella: la creación de una empresa-taller de reparación de móvil con su alumnado del módulo de Equipos Eléctricos y Electrónicos de 2º curso de FP Básica de Informática y Comunicaciones del IES Belén (Málaga). Gracias a esta iniciativa, los estudiantes participantes pudieron realizar sus prácticas formativas en empresas punteras del sector de la reparación de dispositivos móviles, con posibilidades de contratación, al ser la primera vez que tenían alumnado con formación específica en este sector.
Ronda ejerce actualmente como docente del Máster de FP en Inteligencia Artificial y Big Data en el C.P.I.F.P. Nuevo (Málaga); una de las nuevas opciones de estudios que ha traído consigo la nueva Ley de Formación Profesional y que supone una formación ‘extra’ que permite a los estudiantes que poseen un Ciclo Formativo de grado Superior especializarse en un campo determinado de su sector.
Pregunta: ¿Crees que todavía sigue considerándose la Formación Profesional como una opción formativa ‘de segunda’ en comparación a los grados universitarios?
Respuesta: Han sido muchos los avances que se han dado para que esta pregunta no tenga que hacerse. Aún queda camino por recorrer. Sin embargo, es cierto que cada vez el porcentaje de personas que lo consideran una formación ‘de segunda’ es menor. En mi caso, muchos me piden información sobre orientación profesional relacionada con los ciclos formativos en lugar de los grados universitarios. No en vano, parece que la nueva Ley de FP viene a equilibrar más la balanza.
P: ¿Cuál crees que es la causa de que este tipo de estudios hayan estado infravalorados durante tanto tiempo?
R: Hace años que la opción de la FP era seleccionada por aquellos estudiantes que no eran capaces o no se veían capacitados para superar los estudios ‘clásicos’. En mi opinión, esto se debía a factores como los prejuicios de los padres, con una concepción de que la universidad otorgaba mejores salidas laborales y mayor prestigio social; la falta de información y orientación sobre las opciones y oportunidades de la FP; la escasez de recursos y plazas para acceder, así como la desactualización de algunos contenidos y títulos. Hoy en día en FP se puede estudiar programación de videojuegos, Inteligencia Artificial, robótica… En definitiva, se han actualizado los títulos y sus contenidos, se han aumentado las plazas y las dotaciones de recursos (aunque siguen siendo muy escasos). Gracias a la difusión y las buenas prácticas que se están haciendo, se ha logrado cambiar la mentalidad de gran parte de la sociedad, que ahora mira a la FP con otros ojos.
P: ¿Crees que en los centros educativos se orienta e informa suficiente a los estudiantes sobre las opciones de FP?
R: Desde mi experiencia, creo que no. La orientación se centra mucho en Bachillerato y Grados universitarios, sobre todo en alumnado de 17 años. Sin embargo, no se destina el mismo esfuerzo en hacer ver que una preparación práctica como la que brinda la FP permite salir igual o más preparado para puestos de gran demanda laboral: hay familias profesionales que adolecen de paro.
P: ¿La Formación Profesional prepara mejor a los estudiantes para salir al mercado laboral?
R: Sin duda. Sobre todo si hablamos de FP Dual. El contenido de la FP está íntimamente relacionado con las empresas. En el caso de ciclos duales, se pactan con ellas los contenidos y las actividades que se realizarán en el centro educativo y en la propia empresa, por lo que se adapta a las necesidades año tras año. Además, los periodos de Formación en Centros de Trabajo y periodos duales hacen que el alumnado se forme dentro de la empresa, se empape de su idiosincrasia, conozca los métodos de trabajo, herramientas, compañeros, horarios, y un largo etcétera que ayuda a la hora de encontrar empleo.
“Gracias a la nueva ley, la FP al completo se acerca más al mundo laboral y se adapta al tejido productivo de cada territorio. También permite una mayor colaboración entre los centros educativos y las empresas.”
Miguel Ángel Ronda
Gracias a todo ello, la FP al completo se acerca más al mundo laboral y se adapta al tejido productivo de cada territorio. También permite una mayor colaboración entre los centros educativos y las empresas, que propiciará la mejora y adecuación de los contenidos y las competencias profesionales. La dualidad de la FP permite que los estudiantes sean trabajadores de facto de la empresa, con una pequeña aportación en forma de beca que le da valor a lo que hacen. Las compañías saben que el talento bien entrenado supone un ahorro en costes de formación, por lo que disponer de personal cualificado y con experiencia en la propia empresa es fundamental. En mi caso, he colaborado con empresas que directamente no publican ofertas de trabajo, sino que tienen su propia bolsa de alumnado dual que se van incorporando a medida que surgen vacantes.
R: ¿Cuál es el perfil de alumnado con el que trabajas en FP Básica? ¿Crees que los estudiantes que optan por este tipo de estudios se han sentido ‘excluidos’ del sistema educativo actual?
R: Son alumnos con edades comprendidas entre los 16-18 años principalmente, aunque pueden acceder con 15. Por su edad, podrían abandonar el sistema educativo, pero se les ofrece una formación básica que les permite obtener el título en ESO, un título de auxiliar y además da acceso a Grado Medio. Tienen en común el fracaso escolar desde edades tempranas. Además, su entorno familiar adolece de problemas económicos, desestructuración y diferentes patologías. Su autoestima es muy baja y no tienen hábitos de estudio.
En mi caso, he sido profesor de FP Básica (antes denominado PCPI) desde 2010. En todos estos años he podido constatar que siempre ha sido el patito feo del sistema educativo. En muchos centros no se les permitía hacer orla, ni participar en las graduaciones del resto de estudios terminales (4º ESO, Bachillerato, Ciclos Medios/Superiores). Además, desde instancias superiores no se les brinda el apoyo que necesitan, con una dotación adecuada para sus estudios, ni se apoya al profesorado en la búsqueda de empresas para la realización del módulo profesional de Formación en Centros de Trabajo (FCT). Esto es fundamental, pues este alumnado tan joven debe terminar su FCT para poder titular, y en ocasiones no hay empresas que quieran ese perfil. He tenido situaciones de tener que pedir favores a empresas para que acogieran a mi alumnado y no se quedaran sin acabar sus estudios. En otras ocasiones, he tenido que ‘ocultar’ que eran estudiantes de Básica para que no pusieran pegas y los dejaran fuera. Esto los estudiantes no lo perciben, o al menos tratamos de que no se sientan apartados.
“Para conseguir la atención del alumnado de FP Básica es fundamental que las clases sean lo menos tradicionales posibles, tratando de hacerles partícipes de su propio aprendizaje, utilizando recursos actuales, innovadores y aplicables”
Miguel Ángel Ronda
P: ¿Qué se puede hacer para ‘reengancharlos’ y despertar en ellos el interés por formarse?
R: En todos estos años el alumnado, en su gran mayoría, accedía con escasa motivación, dado que un alto porcentaje hacía la elección por cercanía a casa, no por el título en sí. Por ello, el primer problema con el que nos encontramos los docentes es la motivación, para lo que debemos hacerles atractivos los módulos, los contenidos y las salidas que tendrán. Este ha sido mi objetivo desde que empecé con mi primer curso en 2010. Recuerdo que ese año un compañero me dijo que me olvidara de enseñar contenidos de informática, que me centrara en enseñarles educación. Nada más lejos de la realidad: fue un curso maravilloso que guardo con gran recuerdo, en el que nos lo pasamos en grande y la mayoría pudo titular.
Para conseguir su atención es fundamental que las clases sean lo menos tradicionales posibles, tratando de hacerles partícipes de su propio aprendizaje, utilizando recursos actuales, innovadores y aplicables. Pero no basta con eso, también hay que tener mucha mano izquierda con ellos, dado que muchos no poseen herramientas sociales para afrontar circunstancias adversas. En este sentido, en lugar de penalizar que alcen la voz o no hablen de forma adecuada, por ejemplo, es mejor enseñarles herramientas para hacerse escuchar con otro tono y utilizando otras palabras. Desde mi experiencia, el castigo es contraproducente.
P: Has impartido clase en el módulo de Equipos Eléctricos y Electrónicos del curso de FP Básica de Informática y Comunicaciones. ¿Hay brecha de género en tus clases? ¿Qué se puede hacer para que las chicas se sientan más atraídas por los estudios de FP relacionados con las materias STEAM?
R: La brecha de género se da no solo en FP Básica, sino en todos los estudios tecnológicos. En concreto, en mis clases siempre he tenido un porcentaje ínfimo de mujeres, en ocasiones hasta el 0%. Para conseguir que las mujeres accedan a estudios de FP relacionados con las materias STEAM se debe trabajar desde Educación Infantil (de 0 a 3 años). Deben tener referentes femeninos, y nuestra obligación es mostrárselos, darles la importancia que tienen y han tenido en la historia, quitar complejos absurdos sin fundamento, y darles la posibilidad de elegir sin que tengan en cuenta otros aspectos que puedan alejarles de la realidad, que no es otra que el hecho de que son igual de capaces que los hombres.
P: ¿Qué le dirías al alumnado que está planteándose estudiar Formación Profesional pero tiene dudas?
R: Les diría que miren noticias de fuentes fiables sobre contratación de titulados de FP. También que miren cuáles son los estudios con más salidas, y que busquen dentro del enorme catálogo disponible aquellos estudios que cuadren con sus intereses y con las salidas laborales. Les diría que al finalizar sus estudios, cada dos años tendrán una FCT en una empresa, que supondrá experiencia laboral, y que ahora además disponen de los cursos de especialización o máster de la FP, para orientar su carrera en sectores con gran demanda y necesidad de alta especialización.