A lo largo del primero de los Encuentros EDUCACIÓN 3.0, los cuatro representaciones editoriales tuvieron la oportunidad de debatir acerca de temas como el futuro del libro de texto en el panorama educativo, la implantación de las nuevas metodologías en el aula o quiénes son los nuevos agentes en el mercado de los contenidos digitales. Para finalizar dicho encuentro, el debate miró hacia el futuro, hacia cómo será la educación en los próximos años.
Antonio Cara, asesor de Innovación Editorial de Anaya; Javier Cazaña, director de Estrategia y Desarrollo de Negocio de Macmillan Iberia; José Manuel Cerezo, director de productos digitales de Santillana; y Rosa Luengo, directora de Creación Editorial de Edelvives se mostraron optimistas y esperanzados con lo que está por llegar. ¿Cuáles fueron sus predicciones?
Necesidad de un pacto educativo
Rosa Luengo, de Edelvives, puso el acento en el ámbito político para que, de una vez por todas, se establezca una ley educativa, fuerte y sin vaivenes. “Me gustaría poner el foco en cómo soñamos qué podrá ser la educación en estos 20 o 30 años. Soñaría con un pacto educativo en este país y que la educación deje de ser moneda de cambio y con una estabilidad que nos permita crecer como país”.
Por su parte, Cerezo de Santillana, destacó lo que para él es la realidad más inmediata de cara al futuro de la educación: los docentes y los alumnos, que son la parte más importante del sistema. “Dentro de 20 o 30 años seguirá habiendo alumnos, alumnas y profesores y profesoras. Creo que es lo único que está seguro. Me gustaría pensar que algunas tecnologías podrán tener cierto protagonismo en los próximos años, como la realidad aumentada, el aprendizaje adaptativo, la inteligencia artificial o el cloud computing. Todo ello, y desde mi punto de vista, nunca sustituyendo al profesorado, sino apoyándole”.
Nuevas metodologías para nuevos empleos
Cazaña, de Macmillan, consideró que el futuro de la educación irá unido a distintos cambios necesarios en los contenidos, las metodologías y en el ámbito tecnológico. “Un reciente informe del Foro Económico Mundial dice que el 65% de los alumnos que actualmente están en Primaria ocuparán un puesto de trabajo que, a día de hoy, no existe. Esto nos hace suponer que muchos de los contenidos que estamos creando hoy, no tendrán sentido en el futuro, y aparecerán otros nuevos”.
En este contexto, el director de Estrategia y Desarrollo de Negocio de Macmillan destacó el importante papel que las editoriales deben jugar frente a estos cambios. “Es difícil saber cómo será la educación de aquí a 50 años, pero lo que sí deberíamos tener claro es cómo deberíamos ser nosotros en el sector editorial. Hay que continuar dándole valor al docente, continuar liderando la implantación de esas nuevas metodologías y de esas nuevas necesidades de contenido”.
Cambio de modelo laboral
Antonio Cara, de Anaya, predijo los mayores cambios en el ámbito tecnológico y en el laboral. “Lo más disruptivo posiblemente se centrará en cómo la Inteligencia Artificial se introduce en la educación de aquí a 20 o 30 años. Además, creo que es necesario darle una vuelta de tuerca al papel del ‘curator’ como editor en un mundo mucho más globalizado y tecnificado. También tienen que cambiar mucho los tiempos y los espacios en la educación: ahora tenemos un modelo presencial con un horario que responde a la sociedad industrial de hace un siglo y medio. El cambio de la escuela tiene que proceder del cambio de modelo laboral”.