El uso de las Redes Privadas Virtuales, también conocidas como VPN (Virtual Private Networks), no ha parado de crecer en los últimos años, especialmente desde marzo de 2020; momento en el que la pandemia obligó a trasladar las clases y las oficinas a los hogares. De hecho, la búsqueda de este término en Google aumentó drásticamente en ese momento, según Google Trends. Y es que las VPN ayudan a disfrutar de una conexión a Internet totalmente segura: nadie que no esté autorizado puede acceder ni a la IP del usuario, a ninguno de sus datos ni rastrear su actividad en línea, independientemente de desde dónde navegue. Así lo explica Private Internet Access (PIA) en su web: una VPN con más de 10 millones de usuarios en todo el mundo compatible con Windows, Linux, Mac, iOS, Android y Smart TV con la que es posible navegar por la red desde servidores ubicados en todo el mundo y que además ofrece asistencia técnica a cualquier hora todos los días de la semana.
Usos para la comunidad educativa
En un entorno como el educativo, en el que el uso de Internet y de herramientas alojadas en línea (plataformas, recursos, datos de los estudiantes) está tan extendido, garantizar la seguridad informática para evitar ataques de malware o robo de datos es esencial. Y en esto pueden ayudar las redes VPN. Y es que, cuando se navega desde una red privada virtual en un centro educativo o desde el hogar, todo lo que se hace desde el dispositivo en cuestión es anónimo y no hay posibilidad de que lo rastreen. Por lo tanto, el riesgo de que se roben nombres de usuario y contraseñas se reduce drásticamente, entre otros beneficios. Y su uso es extremadamente sencillo: basta con instalar una de estas soluciones en el equipo –un proceso en el que se tardan minutos– y activarla cuando se desea ocultar la actividad en la red. Estos son algunos de sus beneficios.
- Navegar seguros en redes Wi-Fi públicas. Para garantizar la ciberseguridad del usuario, las VPN redirigen el tráfico de Internet a través de un túnel encriptado en el que el usuario tiene una nueva dirección IP que oculta sus datos de navegación. Esto es especialmente útil cuando se desea navegar desde una red Wi-Fi pública, como las de un centro educativo, ya que impedirá que la información privada (datos de inicio de sesión, por ejemplo) y los mensajes puedan ser accesibles a los hackers.
- Para la formación a distancia. La popularización de las formaciones a distancia supone que los estudiantes visualicen las clases desde diferentes ubicaciones. Gracias a la conexión VPN, pueden acceder a la misma red del centro de estudios desde cualquier lugar, sin miedo a que terceros puedan robar información de valor.
- Protege tus datos incluso fuera de casa. Muchas personas reciben a diario una gran cantidad de spam debido a los datos que el proveedor de servicios de Internet (ISP) recopila y vende a terceros. Pero la conexión VPN evita que las empresas puedan aprovecharse de esta información personal, ocultando la dirección IP y cifrando los datos para protegerlos de los intereses comerciales.
Otros usos
Pero su utilidad va mucho más allá, y las VPN tienen aplicaciones en otros muchos escenarios: desde el acceso sin límites a plataformas de streaming o la posibilidad de reservar vuelos y hoteles a bajo precio. Os explicamos cómo.
- Acceder a servicios de streaming de otros países. Es habitual intentar acceder a algún contenido de las principales plataformas de streaming, como Netflix o Amazon Prime Video, y que aparezca un aviso en el que se informa de que no está disponible para esa ubicación. Pues bien, las VPN, como simulan que se está navegando desde distintas ubicaciones, permiten evitar esas restricciones y acceder a todos ellos.
- Descargas P2P. Es habitual que algunos proveedores bloqueen las descargas P2P (de programas torrent, por ejemplo), mientras que otros establecen restricciones que conllevan que funcionen mal. La conexión a través de una VPN elimina este posible bloqueo porque el proveedor nunca sabrá qué se está haciendo desde el ordenador.
- Encontrar vuelos y alojamientos más baratos. Factores como la dirección IP, el historial de compras, la oferta y demanda o la conexión Wi-Fi influyen en los precios que muestran las plataformas de compra de vuelos o de reserva de hoteles online. Pero al utilizar la VPN los precios que aparecen en estos sitios cambian, pudiendo obtener uno más barato si la nueva ubicación tiene una menor demanda de vuelos o alojamientos, ya que estas empresas utilizan un sistema de precios dinámicos que varían en función de diferentes variables.
Suscripción exclusiva a PIA
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