Ubicada en Barakaldo (Bizkaia), la academia de idiomas Maxus Formación ha actualizado este verano el equipamiento de todas sus clases con monitores interactivos Traulux TLM80 de 75 y 65 pulgadas, que son usados como pizarra y herramienta para digitalizar la enseñanza del inglés, y altavoces Poly Sync 20, que sirven como apoyo a los estudiantes para escuchar las clases en remoto.
Apuesta por la innovación
Este centro examinador de la certificación Oxford Test of English, ofrece clases presenciales y online a alumnos de todas las edades: desde niños de 3 años hasta adultos, y formación en inglés para empresas. Desde que abrió sus puertas en 2013, tras detectar la necesidad de una enseñanza de inglés centrada en la satisfacción del alumnado, Maxus Formación ha apostado por la innovación.
“Somos un centro de formación ‘glocalizado’, pensamos globalmente pero actuamos localmente. Queremos que la comunidad en la que residimos se capacite para el futuro, que mejore, avance; y que nuestras empresas innoven y salgan al exterior”, explica el director del centro, Max Minicucci. Confiando en las nuevas tecnologías para conseguirlo, decidieron cambiar sus antiguos proyectores con el asesoramiento del integrador AV Dinof y el suministro de Charmex.
“Elegimos estas soluciones para mejorar la eficacia de nuestra metodología. Los monitores interactivos nos permiten un menor uso de material impreso y una mejor calidad de las clases online. Mientras, los altavoces-micro Poly Sync se utilizan cuando damos clase en línea en las que, gracias al micrófono omnidireccional, los alumnos en remoto pueden escuchar correctamente tanto al profesor como al resto de sus compañeros que están en clase de forma presencial”, relata.
En Maxus enseñan bajo una metodología comunicativa que sigue el principio de la comunicación, por medio de la cual todo el proceso de enseñanza-aprendizaje se lleva a cabo por la comunicación directa. “Los contenidos se imparten según los intereses del alumnado, siendo el protagonista de todo el aprendizaje y el docente su principal apoyo. Con este tipo de metodología los alumnos comprenden que es bueno equivocarse, ya que por medio del error aprenderán a formar las frases y a expresarse de manera correcta y esto les ayuda a ser conscientes del avance que hay en su aprendizaje”, cuenta Minicucci.
Una pantalla por aula
Así, en todas sus aulas (un total de seis) cuentan con una pantalla táctil y todos los ‘teachers’ están entrenados para su uso con la metodología comunicativa. “Cualquier alumno que tenga clase de inglés en Maxus, tiene acceso a esta tecnología innovadora”, resalta el director.
Además, desde la implantación de los monitores Traulux han readaptado su metodología para digitalizar todas las actividades que realizan en clase. Como por ejemplo, juegos de simulacros o role playing, trabajos en parejas, juegos o intercambio de idiomas; centrándose siempre en actividades que fomenten la comunicación o la conversación en el idioma que esté aprendiendo el alumnado.
El feedback ha sido totalmente positivo, “en particular porque los monitores son fáciles de usar y no necesitan muchos conocimientos tecnológicos para dictar las clases con eficacia y eficiencia”, relata. Añadiendo que todos los ‘teachers’ han recibido la formación necesaria por parte de Dinof y Charmex para usar esta tecnología.
Para finalizar, explica que durante el año académico se harán más sesiones de capacitación, “donde juntos crearemos ejemplos de cómo mejorar aún más nuestra metodología gracias a estos los monitores interactivos y altavoces inalámbricos”.