Gamificación e innovación son los retos educativos de 2021

‘Gamificación e innovación, el reto educativo de 2021’ es un encuentro que celebra ABANCA a través de su Obra Social Afundación y forma parte del ‘Mes de la Educación’ con motivo del Día Internacional de la Educación proclamado por la ONU. Se celebra el próximo 19 de enero a las 17:30 h y su objetivo es invitar a los docentes y la comunidad educativa en general a reflexionar y debatir sobre los retos de futuro de la educación en el recién comenzado 2021.

Lluís Bonet y Lourdes Jiménez, ganadores del Premio EDUCA ABANCA, charlarán con Clara Cordero, formadora y referente en innovación educativa, sobre los retos educativos de este nuevo año. Ella misma reflexiona sobre ello en la siguiente entrevista.

Pregunta: Siempre estás ocupada con nuevos proyectos, ¿qué tienes ahora entre manos?

Respuesta: Además de seguir con mis proyectos formativos, cada vez hago más labores de consultoría educativa orientada a la gamificación y el diseño de juegos, la tecnología y las competencias transmediáticas y narrativas. Por ejemplo, ahora mismo colaboro con ABANCA y su Obra Social Afundación, en un programa escolar muy atractivo sobre educación financiera: Segura-Mente. En esta tercera edición ha desarrollado un juego inmersivo para trabajar la educación financiera desde la perspectiva de un viaje que los alumnos deben planificar en base a un presupuesto, tomar decisiones… Una actividad educativa muy interesante.

P: El objetivo es facilitar la labor de los docentes, ¿verdad?

R: Efectivamente. Por eso es tan importante identificar los retos a los que los docentes debemos enfrentarnos en este recién llegado 2021. Ese es, en sí, el primero de nuestros retos, identificarlos, despejar las incógnitas sobre el futuro en la educación.

Este es el tema central de un encuentro online en el que voy a participar junto a otros especialistas en innovación educativa el 19 de enero. Con la plataforma Afundación TV vamos a buscar la colaboración y la participación de toda la comunidad docente para, entre todas y todos, transformar positivamente el día a día en las aulas.

Porque tenemos una gran responsabilidad: preparar a los ciudadanos del futuro. Un futuro más incierto que nunca. ¿Sabíais que el 75% de los puestos de trabajo que desempeñarán nuestras alumnas y alumnos en las próximas décadas aún no se han inventado? Es fascinante, pero al mismo tiempo una gran responsabilidad en la que los docentes de hoy tenemos que empezar a trabajar.

P: El primer trimestre fue una vuelta a las aulas un tanto peculiar… ¿Qué destacarías de este comienzo de curso?

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R: Lo cierto es que 2020 ha sido un año difícil de llevar, con cambios para los que no estábamos preparados. Sin embargo, los docentes han sabido adaptarse a las circunstancias y han salido adelante con mucho esfuerzo. De hecho, han seguido formándose, han trabajado de manera colaborativa extraordinariamente (la situación lo requería) y han puesto todo su empeño en ofrecer acceso a su alumnado a diferentes recursos para seguir aprendiendo.

Una de las cosas que se ha puesto de manifiesto es la necesidad de fomentar determinadas competencias que van más allá de los contenidos curriculares, que forman parte de una educación integral de la persona. En eso se ha tenido muy en cuenta la realidad de los centros, las competencias digitales y cómo la tecnología rige nuestras vidas y cómo podemos aprovecharla de manera eficaz. Y no solo los docentes, el alumnado y las familias se han visto inmersos también en esta transformación digital acelerada.

P: Teniendo en cuenta este contexto, ¿con qué herramientas crees que cuentan los docentes para afrontar estos retos?

R: Afortunadamente el mundo digital nos ofrece cada vez más recursos para compartir entre docentes. Y también hay cada vez más entidades comprometidas con la sociedad que se implican y tratan de ayudar. Por ejemplo, el programa escolar de educación financiera Segura-mente de ABANCA ha hecho un esfuerzo importante por adaptarse a la nueva realidad educativa, de modo que el alumnado pueda trabajar incluso desde casa.

Creo que es justo la implicación lo que nos lleva a afrontar esos nuevos retos. En mi experiencia, que trabajo con gamificación y diseño de experiencias lúdicas, una de las cosas sobre la que más llamo la atención es el impacto y la inmersión de cara al aprendizaje. Además, es fundamental que todos esos contenidos tengan una relación directa con la vida cotidiana del alumnado, para que esté bien contextualizado y justificar esa necesidad de aprendizaje.

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Por ejemplo, en el proyecto Segura-Mente se utilizan elementos de juego para desarrollar un itinerario formativo totalmente transdisciplinar. No solo se pone el foco en educación financiera, algo necesario para el día a día, sino en la reflexión sobre ella, que es algo imprescindible para que podamos hablar de aprendizaje y la manera en que conecta con otro tipo de objetivos transversales, como los ODS. Con los Objetivos de Desarrollo Sostenible fomentamos que el alumnado tome parte activa en su papel de consumidores responsables y como ciudadanos del siglo XXI en lo que respecta a la sostenibilidad, el medio ambiente, etcétera.

De esta manera, se comprende que la vida funciona de un modo global, más transversal, no separados unos conocimientos de otros. La narrativa que se ha trabajado, además, facilita mucho esa inmersión y esa contextualización, porque parte de una historia que muchos alumnos y alumnas viven dentro del entorno escolar y lo eleva a otra categoría, una en la que realmente son participantes activos de la planificación de un viaje para toda la clase.

P: Como dices, está demostrada la importancia de trabajar aspectos clave para la vida desde edades tempranas, pero, ¿cómo logramos hacer más atractivas materias como la educación financiera y generar así un aprendizaje significativo?

R: En el caso de la educación financiera, creo que siempre es la gran olvidada o se relega un poco a lo que suceda en cada hogar y sobre todo no se trabaja de manera global y completa. Aunque ya el RD 126/2014 habla de introducir la educación financiera en el currículo de Primaria, lo cierto es que se trabaja a un nivel matemático pero no a un nivel social.

Creo que sería muy beneficioso trabajarla globalmente para incorporar esa parte social que atiende a diferentes aspectos como el consumo, la planificación y el ahorro, unido a la afectividad, la inclusión, la preocupación por las desigualdades… Aunque creo que este campo lo domina más Lourdes Jiménez (Premio EDUCA ABANCA Mejor Docente de Educación Primaria), que participará conmigo en el encuentro online que comentaba anteriormente y al que está invitada a participar toda la comunidad docente.

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P: Y en el caso de Secundaria, ¿cómo podemos fomentar la motivación y la implicación del alumnado en la Educación Financiera?

R: Es una edad en la que son más proactivos y buscan organizar su propio presupuesto para las salidas con los amigos, para excursiones, incluso (cada vez más) para proyectos personales. Esa semilla emprendedora forma parte de ellos y lo que tenemos que hacer es alentarla y cultivarla con información adecuada.

Volviendo al ejemplo con el programa Segura-Mente, se intenta aprovechar el carácter lúdico de la experiencia para tratar temas como la contabilidad, los seguros, los presupuestos... algo que es necesario si vives en este mundo. Ya no puedes coger un avión sin que te pregunten por el seguro, no puedes recibir una beca si no tienes una cuenta corriente... por tanto, la educación financiera es algo imprescindible en el día a día de la juventud actual.

De todo esto Lluis Bonet, Premio EDUCA ABANCA Mejor Docente Secundaria y Bachillerato, nos hablará en el encuentro online del 19 de enero.

P: ¿Por qué recomendarías a los docentes que no se pierdan el encuentro online del 19 de enero: ‘Gamificación e Innovación, el reto educativo de 2021’?

R: Como decíamos, nos encontramos en un momento perfecto para planificar el futuro de la educación de forma colaborativa: el colectivo docente debe afrontar nuevos y apasionantes retos y queremos que el primer paso sea el diálogo. En general, creo que será un encuentro muy beneficioso para todos los docentes, para encender esa lucecita de que no estamos solos y que hay proyectos magníficos que podemos aprovechar sin partir de cero.